El secretario de Salud del estado, José Antonio Martinez García, desmintió las especulaciones sobre una supuesta negligencia médica en torno al fallecimiento del gobernador Miguel Barbosa, orquestada por un médico señalado por actos de corrupción durante el morenovallismo.
Dicha versión la difundió el doctor Juan Carlos Pérez Alva, en una entrevista con el portal e-consulta, luego de que fuera filtrada una supuesta radiografía de pulmón que presuntamente pertenecía a Miguel Barbosa, según publicó el portal Latinus.
Pérez Alva es un exfuncionario del morenovallismo que no terminó en la cárcel porque “una exgobernadora que ya falleció, lo salvó”, reveló Martínez García.
Dijo que la única referencia para determinar si hubo o no negligencia sobre el procedimiento de atención a la salud que recibió Miguel Barbosa, es el expediente técnico, el cual se encuentra en manos de la familia del exmandatario poblano.
“El único instrumento para decir si hay negligencia médica o no, es el expediente clínico, es un instrumento legal, ese expediente clínico lo tiene la familia Barbosa Orozco”, puntualizó.
En entrevista, tras participar en una reunión de gabinete con el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina el pasado viernes, el titular de Salud se refirió al oscuro pasado de Pérez Alva en el Hospital General del Sur, en donde lucró con las instalaciones, convirtiendo el área de hemodinamia en una clínica privada.
Además, cuestionó las declaraciones que dio el médico, quien habría dicho que Barbosa Huerta sufrió un infarto e hizo una serie de conjeturas, porque “o tiene ojos de electrocardiograma o de ecocardiograma o es un verdadero superhéroe que puede hacer necropsias por telemetría”, recriminó.
Asimismo, dijo que en lugar de realizar diagnósticos sin sustento, el exfuncionario del Hospital General del Sur debería aclarar las presuntas irregularidades que cometió en dicho nosocomio, del cual, incluso, fue corrido.
“Pregúntele ustedes por qué no lo dejan entrar en la Beneficencia Española, en el Hospital Ángeles, y por qué lo corrieron de la Secretaría de Salud, cuando se robaba todo lo de hemodinamia y lo mandaron a correr”, declaró.
Por estas irregularidades, Juan Carlos Pérez fue denunciado, pero no enfrentó ningún proceso penal, ya que, acusó, intervino la exgobernadora Martha Érika Alonso Hidalgo para que no terminara en la cárcel.
“Se iba a ir a la cárcel, ¿saben quién lo salvó?, una exgobernadora que lamentablemente falleció en un accidente”, fustigó Martínez García.
NO DESCARTA DENUNCIAR ACTOS DE CORRUPCIÓN
El funcionario estatal no descartó iniciar una investigación en el Hospital General del Sur, respecto a las denuncias de los propios médicos que en su tiempo acusaron las irregularidades cometidas por Pérez Alva.
“Ya en su momento se verá”, dijo Martínez García respecto a los presuntos delitos que habría cometido su par en el área de salud y que habrían sido solapados por funcionarios de la administración morenovallista y galista.
En 2019 se denunciaron las presuntas irregularidades de Juan Carlos Pérez en Hospital General del Sur, que, de acuerdo con una columna periodística aparecida en La Jornada de Oriente, “habría dejado por lo menos cien millones de pesos de ganancias”.
De acuerdo con los señalamientos ahí vertidos, el médico lucró y se apoderó de los insumos, el millonario equipamiento, el personal médico, los fármacos y las ambulancias del área de cardiología.
Dicha versión periodística, Juan Carlos Pérez Alva utilizaba la infraestructura del Hospital General del Sur para operar a sus pacientes que captaba de forma privada. Con la llegada a la minigubernatura, varios médicos hicieron llegar las denuncias a Antonio Gali; sin embargo, no fueron atendidas en su momento.
