El presidente del Comité Directivo Municipal del PAN en la capital poblana, Jesús Zaldívar Benavides, salió en defensa del alcalde Eduardo Rivera Pérez, luego de la denuncia presentada por Aristóteles Belmont, líder provisional de Morena, por una supuesta violación del munícipe a la veda por la consulta de revocación de mandato.
Esa medida, dijo el panista, es una muestra de la ignorancia y doble moral de los morenistas.
Al llegar al gobierno municipal, indicó el dirigente del albiazul, Rivera Pérez encontró una ciudad despedazada y en completo abandono por parte de la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco, lo que obliga a las autoridades a redoblar sus trabajos para revertir esa condición negativa.
“Si hubieran dejado en excelentes condiciones a la capital, posiblemente no se tendría que estar trabajando sin descanso, pero son los ciudadanos los que exigen que se les cumpla”, puntualizó.
En entrevista, Zaldívar Benavides explicó que la veda establecida por el Instituto Nacional Electoral, prohíbe la contratación de espacios para la promoción de obras o proyectos de gobiernos hasta después del 10 de abril, además de que no se pueden realizar pronunciamiento sobre la consulta de revocación.
Eduardo Rivera, añadió, no ha contratado espacios, pero tampoco puede prohibir a los representantes de los medios de comunicación que realicen una cobertura informativa sobre el trabajo de gobierno.
“El Ayuntamiento de Puebla tiene la obligación de trabajar todos los días sin descanso, tiene una gran responsabilidad con los ciudadanos para regularizar y hacer más eficientes todos los servicios y programas que la ciudad necesita, ya que estos fueron prácticamente abandonados por la administración anterior de Morena”, puntualizó.
Y, agregó: “Los ciudadanos eligen a las autoridades municipales por un período de casi mil cien días y, sin importar el color, sean guindas, azules, amarillos, naranjas, tricolores, o rojos, no pueden detener las acciones de gobierno durante sesenta días, sino que deben seguir trabajando”.
El dirigente panista fue más allá y sostuvo que la veda “no significa vacaciones ni descanso, tampoco dejar de informar a la ciudadanía”, sino que es una medida que “prohíbe promover una imagen personal para influir a favor o en contra de la consulta ciudadana” y en ningún momento significa “paralizar las actividades en ningún orden de gobierno, federal, estatal o municipal”.
La doble moral e ignorancia del dirigente de Morena en Puebla, expuso, queda evidenciada, ya que bajo los propios argumentos de Aristóteles Belmont, “la inauguración del aeropuerto Felipe Ángeles prevista para el próximo 21 de marzo, tendría que suspenderse hasta después de la consulta, o bien las giras que se están realizando”.