El reloj para la caída definitiva de Francisco Romero Serrano comenzó a correr, pues el Pleno del Congreso del Estado aprobó dar inicio con el procedimiento para su remoción como titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE).
Con 36 votos a favor y cuatro abstenciones -de integrantes del grupo legislativo del Partido Acción Nacional (PAN)-, los diputados locales aprobaron el acuerdo presentado por la Mesa Directiva, por lo que una vez que la Comisión de Control, Evaluación y Vigilancia de la ASE notifique formalmente a Romero Serrano, sus días como auditor estarán contados.
El acuerdo establece que, una vez que sea notificado personalmente el titular de la Auditoría de las solicitudes de remoción que fueron recibidas en el Congreso local mediante copias certificadas, el proceso legal comenzará al día siguiente en la comisión.
Romero Serrano contará con un plazo improrrogable de cinco días hábiles, a partir de la notificación, para que pueda expresar lo que a su derecho convenga respecto de las solicitudes para el inicio del procedimiento de remoción y ofrecer o exhibir las pruebas que crea necesarias.
En este periodo, Romero Serrano deberá formular por escrito las manifestaciones de su defensa para la Comisión de Control de la ASE, etapa en la que podrá designar a las personas que lo representen para oír y recibir notificaciones en su nombre, además de que deberá señalar un domicilio para recibir cualquier tipo de notificación, y que deberá estar en el municipio de Puebla.
No obstante, en caso de que el titular de la Auditoría omita designar algún domicilio que cumpla con las especificaciones para recibir notificaciones, éstas le serán practicadas mediante fijación en los estrados del edificio sede del Congreso del Estado y, si no formula manifestación alguna o no llega a ofrecer pruebas dentro del plazo establecido, los integrantes de la comisión entenderán por extinto el derecho del auditor.
Una vez que se haya desahogado la etapa de presentación de pruebas, la Comisión de Control de la ASE notificará a Romero Serrano para que pueda formular los alegatos que crea necesarios y, para esta etapa, tendrá un plazo de tres días hábiles a partir de que sea notificado de este acuerdo. Cabe destacar que si no formula alegatos, se entenderá por extinto su derecho.
Cuando venza el plazo para presentar alegatos, la comisión dictaminará sobre la existencia de los motivos suficientes para determinar la remoción del titular de la Auditoría y, en caso de ser procedente, el dictamen será remitido a la Junta de Gobierno y Coordinación Política para que convoque a sesión del Pleno para su discusión y votación.
La resolución que tome el Pleno surtirá efectos a partir de su aprobación y se notificará de manera personal a las partes involucradas a través de la Secretaría de la Mesa Directiva. La remoción debe ser aprobada por el voto mayoritario de las dos terceras partes presentes en la sesión.
Los diputados de Morena Eduardo Castillo López, Azucena Rosas Tapia y Roberto Solís Valles, presentaron tres solicitudes de remoción del auditor luego de que fuera vinculado a proceso por el delito de violencia familiar, y detenido por el posible delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.