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sábado, diciembre 7, 2024

Buscan reconocimiento a productoras de la región en Carrera de las Tortillas

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Gudelia Victoria Albino Méndez es una de las veteranas de la Carrera de la Tortilla que desde hace 29 años se desarrolla en Santa María Coapan, localidad perteneciente al municipio de Tehuacán, y que el próximo 6 de agosto tendrá lugar con la participación de más de 400 mujeres productoras de la región. 

Al igual que sus compañeras que elaboran tortillas, busca que este año se reconozca a las mujeres originarias, luego de que el premio de la carrera ha sido otorgado a atletas profesionales en otras ediciones, generando molestia entre las participantes. 

De la misma manera, lucha porque las nuevas generaciones de jóvenes preserven esta tradición, la cual la ha llevado a otras ciudades del extranjero en donde ha podido poner en alto el nombre de Santa María Coapan. 

La falta de interés de las nuevas generaciones y de apoyo de las autoridades municipales, ha hecho difícil su labor, sin embargo, mantiene la esperanza de que las nuevas vendedoras de tortillas porten con orgullo los trajes regionales, pues ahora lo hacen en tenis y pantalones. 

Doña Gudelia se dio unos minutos para atender diferentes entrevistas que, por separado, le hicieron varios reporteros que cubrieron este lunes la conferencia de prensa que encabezó el secretario de Cultura, Enrique Glockner Corte.  

La Carrera de la Tortilla de Tehuacán se ha convertido en un referente nacional e internacional, en el marco del Festival del Maíz de Tehuacán, este año se espera superar el número de mujeres participantes en todas las categorías de la competencia. 

La convocatoria es abierta a todas las edades, pues en ella han participado niñas desde los seis años de edad hasta mujeres de 70 años. La señora Gudelia Victoria Albino empezó a correr a los 33 años de edad, hoy tiene 62. 

“Me gusta participar y representar a mi propio pueblo porque así nuestras costumbres y tradiciones son mejores y más bonitas”, comentó. 

Victoria Albino corrió en la primera edición, fue una de las precursoras de la carrera y hoy corre en la categoría de veteranas.  

“Simplemente la emoción nos invadió y vámonos a inscribirnos. A como nos toque, lleguemos o no lleguemos (a la meta) a como nos toque, vamos a inscribirnos”, según relató que así nació su interés por participar en la primera carrera hace 31 años. 

Como impulsoras de la carrera, existe cierto celo por la organización, pues originalmente la competencia ha sido convocada por la junta auxiliar de Santa María Coapa, pero tiene el aval del municipio. “Somos como sus hijitos, al cual tienen que apoyarlos”, dice a manera de broma. 

“Me gusta la cultura, me gustan las raíces de nuestro pueblo y por es seguir fomentando de esta manera y seguir promoviendo lo que son nuestras costumbres que ya llevan muchos años”, expresó. 

Como toda costumbre, la de las tortilleras de San María Coapa ha sufrido el embate de la globalización, pues ahora las tortilleras ya no salen a ofrecer sus productos con la indumentaria tradicional carcaterística de la comunidad. 

“Si va a Tehuacán y ve vendiendo a una coapeña con pantalón de mezclilla, con blusa y mandil, y llevan tenis, pero a nosotras las viejitas nos va a dar pena ir con todo eso, nosotras todavía con nuestra enagua, nuestro delantal, nuestra camisa y nuestro rebozo”, explicó.

Resaltó que estas tradiciones deben ser parte de la vida de los pobladores de Santa María Coapa “como nuestras raíces, nuestra identidad, nuestra presentación dentro y fuera de todo lugar donde nos presentemos”, acotó. 

Las lenguas originarias es otra de las identidades que se está perdiendo entre los más jóvenes de la comunidad, señaló al tiempo de lamentar que no existe apoyo por parte de las autoridades para apoyar a quienes tienen la inquietud de seguir preservando las costumbres de los pueblos. 

“Nos limitamos para seguir fomentando nuestras costumbres”, recriminó, pero también reconoció que el uso cada vez más frecuente de la tecnología entre los jóvenes ha fomentado que se aparten de las tradiciones, pues pasan más tiempo en los equipos electrónicos que en tener interés en aprender a hablar náhuatl. 

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