| Ignacio Juárez/Osvaldo
Valencia
Las precampañas a la gubernatura de Puebla se convirtieron en el primer termómetro electoral con miras a la gran batalla del 2 junio próximo y el morenista Alejandro Armenta Mier prácticamente fulminó a su contrincante panista Eduardo Rivera Pérez en todos sentidos: narrativa, impacto digital y escucha social, mediciones de encuestas, eventos masivos y el respaldo de las diferentes fuerzas políticas.
Más aún: El abanderado de Morena, Partido del Trabajo, Partido Verde, Nueva Alianza y Fuerza por México es el puntero indiscutible en 25 mediciones desarrolladas por 13 empresas encuestadoras en los últimos dos meses, según el concentrado denominado “Encuesta de encuestas” -al que estos reporteros tuvieron acceso- y rebasa por dos dígitos a su adversario de la alianza PAN, PRI, PRD y Pacto Social de Integración.
De acuerdo con dicho concentrado, Alejandro Armenta suma 51 por ciento de las preferencias para la gubernatura de Puebla, mientras que Eduardo Rivera obtiene 32 por ciento, es decir, una distancia promedio de 19 puntos porcentuales.
Por si eso no fuera poco, los 10 días de precampaña ahondaron la brecha en cuanto a las preferencias electorales y dieron margen a una primera conclusión: un comportamiento estable por parte del morenista y una caída del precandidato blanquiazul.
LA MÁQUINA MORENISTA
Tras la etapa de precampaña —del 25 de diciembre al 3 de enero—, la percepción de triunfo del morenista fue más allá de los números de los sondeos, pues en los eventos públicos que realizó en las cabeceras de los 26 distritos electorales permeó el mensaje de que en la coalición Sigamos Haciendo Historia existe un proyecto de unidad no solo con la suma de cuadros de otros partidos políticos sino con cohesión de los cuadros al interior de Morena.
En un hecho inédito, Alejandro Armenta logró que Rosario Orozco Caballero, viuda de Miguel Barbosa, compartiera templete con la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco y juntas alzaran la mano del precandidato en señal de unidad y triunfo.
En contraste, el precandidato de la coalición Mejor Rumbo para Puebla combinó su proselitismo con actos desdibujados en los que apenas y reunió a 100 personas, con la vieja costumbre panista de colocar microperforados en el transporte público —que le valió el amago de una denuncia ante las autoridades electorales— y cobijado por precandidata presidencial de oposición Xóchitl Gálvez Ruiz.
Aunque el ahora expresidente municipal de Puebla decidió no realizar eventos el día de navidad para “no ser anticlimático” con las festividades, el coordinador de la Defensa de la Transformación en Puebla arrancó con un encuentro con la militancia y simpatizantes desde la junta auxiliar de La Libertad en la capital poblana. Al acto acudieron más de 2 mil personas y se dieron cita todos los liderazgos del partido a nivel local y quienes aspiraron a la candidatura que encabeza Alejandro Armenta.
En primera fila, Armenta fue arropado por Ignacio Mier Velazco, Julio Huerta Gómez, Claudia Rivera Vivanco y Lizeth Sánchez García; los dirigentes estatales de Morena, Partido del Trabajo, Verde Ecologista de México, Nueva Alianza Puebla y Fuerza por México; así como la coordinadora de giras de Claudia Sheinbaum, Esthela Damián.
En contraste, el precandidato panista comenzó sus recorridos en la región de Huauchinango y Chignahuapan, con actividades que podrían violar el Código de Instituciones y Procesos Electorales del Estado, pues el exalcalde recorrió casas y negocios de ciudadanos sin estar identificados como militantes del partido, lo que vulneraría las reglas del periodo de precampaña que limita las actividades solo a militantes de los partidos políticos.
Pero eso se vio eclipsado por el evento organizado en Huauchinango, donde solo se observaron poco más de 100 simpatizantes, sin contar al staff del precandidato ni dirigentes, lo que lo exhibe un peor inicio al que realizó Enrique Cárdenas, un no militante del PAN, en 2109 cuando juntó más de 200 personas en sus primeras actividades de precampaña.
En sus eventos públicos, el senador morenista se hizo acompañar en todo momento por los dirigentes de los cinco partidos que decidieron impulsar su candidatura al gobierno del estado, así como de los aspirantes a la candidatura.
EL CONTROL DEL ECOSISTEMA DIGITAL
De acuerdo con un estudio elaborado por la empresa especializada Árbol Rojo, Alejandro Armenta fue el ganador de la batalla en el ecosistema digital. Del 25 diciembre de 2023 al 3 de enero de 2024, el nivel de menciones, interacciones y alcance del morenista en las distintas plataformas digitales fue mayor respecto de su contrincante de la coalición PAN-PRI-PRD-PSI.
Por ejemplo, la participación orgánica de sus seguidores registró 20 mil menciones durante los 10 días de precampaña contra los 18 mil 700 de Eduardo Rivera; y en el alcance o la estimación de personas que visualizaron las menciones registradas, el morenista llegó a 14 millones 500 mil usuarios contra 9 millones 900 mil del panista, una diferencia de 4.6 millones.
En la plataforma X —antes conocida como Twitter—, Alejandro Armenta obtuvo mejores indicadores: 15 mil 600 menciones y un alcance de 4.4 millones de usuarios, contra 13 mil 300 menciones y un alcance 3.9 millones de Rivera Pérez.
El “humor social” en redes también registró un porcentaje positivo mayor de 83 por ciento en favor de Alejandro Armenta, mientras que Eduardo Rivera obtuvo un saldo negativo de 16 por ciento.
Respecto a la red social Instagram, las menciones y alcance del morenista llegaron a los 66 mil 500 usuarios contra los 41 mil 700 del exalcalde de Puebla. Esta misma tendencia se reproduce en Facebook, donde las interacciones —acciones de los usuarios en una publicación orgánica o en un anuncio como likes, shares, comentarios, reacciones, guardados, clics en enlace o video— de Armenta sumaron 39 mil 300 contra 19 mil 400 de Rivera Pérez.
Un dato relevante fue la penetración de los FB Live transmitidos por el equipo de campaña del morenista. Por ejemplo, los foros temáticos obtuvieron una conexión de 5 mil usuarios promedio, en tanto que la toma de protesta de comités municipales en Defensa de la Cuarta Transformación generó interacciones y menciones en diferentes regiones del estado; asimismo, el arranque de precampaña, el 25 de diciembre, alcanzó una fuerte presencia digital pese a realizarse en día inhábil.
Por lo que hace a la plataforma de YouTube, tanto en interacciones, menciones y alcance, el precandidato de Morena y aliados obtuvo indicadores superiores al precandidato del PRI-PAN-PRD-PSI, pues la medición del humor social, cuyo análisis de desarrolla a través de programas de inteligencia artificial, Eduardo Rivera registra indicadores positivos menores a los de Alejandro Armenta y negativos de 16 por ciento.
Y BARRE TAMBIÉN EN LAS ENCUESTAS
El equipo de campaña de Alejandro Armenta realizó un concentrado denominado “Encuesta de Encuestas”, que recoge los datos de 25 mediciones elaboradas por 13 empresas encuestadoras en los últimos dos meses, el cual arrojó que mientras el senador con licencia suma 51 por ciento de las preferencias, el panista obtiene sólo 32 por ciento, una distancia promedio 19 puntos porcentuales.
El análisis también advierte que los eventos regionales del precandidato de Sigamos Haciendo Historia y su repercusión mediática fueron mejores que los organizados por Eduardo Rivera, lo que ayudó a que la ventaja en la preferencia electorales de ampliara a dos puntos.
Pero si se analiza el tracking de las mediciones de los últimos dos meses, hay una tendencia favorable y comportamiento estable de Armenta Mier.
Al tomarse una selección de las 10 principales mediciones efectuadas en diciembre y enero —que tienen diferentes metodologías: Cuatro fueron realizadas en vivienda con una base de mil 200 entrevistas, con un margen de error de +/- 3 por ciento; y otras 6 con una base promedio de 800 entrevistas telefónicas, cuyos resultados muestran coincidencias con las realizadas en vivienda—, los resultados muestran variaciones de entre 12 y 40 puntos de distancia entre los dos principales precandidatos.
El margen de victoria promedio se ubica en 19 puntos a favor de Alejandro Armenta, pero destaca que ningún estudio demoscópico arroja una distancia menor a dos dígitos entre ambos precandidatos.