La presidenta Claudia Sheinbaum confirmó, este martes, que las negociaciones entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y su sindicato continúan abiertas, con temas clave sobre la mesa, incluyendo el aumento salarial, mejoras en prestaciones y la exigencia sindical de que Pemex retome el control sobre las pensiones de al menos 30,000 trabajadores.
Según expuso una reportera, dichos trabajadores fueron transferidos sin su consentimiento al Afore Banorte durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Sheinbaum aseguró que el tema ha sido discutido con el director de Pemex y enfatizó que, actualmente, la paraestatal destina cerca de 90,000 millones de pesos anuales al pago de pensiones. Subrayó que su equipo ya revisa pensiones “muy exageradas”.
“Ahí les vamos a dar algunas sorpresas, porque hay pensiones millonarias que se están pagando”, afirmó.
Al ser cuestionada sobre si podrían cancelarse algunas de estas pensiones, Sheinbaum respondió que están en proceso de revisión, ya que no es justificable que una sola persona tenga ingresos tan elevados en su retiro.
Además, la reportera hizo referencia a pensiones en otras instituciones, como la del expresidente Ernesto Zedillo en el Banco de México. La presidenta electa coincidió en que también se deberían revisar esos casos:
“Sí, también. Varios”, respondió.
Sheinbaum reiteró que la revisión y eventual ajuste de estas pensiones desproporcionadas es parte de un compromiso con la justicia social y el saneamiento de las finanzas públicas, sin comprometer los derechos adquiridos de los trabajadores en situación vulnerable.