El pasado fin de semana comenzó el torneo apertura 2024, del mal llamado Futbol Mexicano, y digo esto porque en un torneo donde están inscritos hasta ahora, 139 jugadores no nacidos en México y de 18 técnicos, solo cuatro son nacionales, lo que va o por lo menos, tiene que predominar, es un estilo de juego, de cualquier parte del mundo, menos que mostrar las características y el desarrollo del futbolista y técnico mexicano.
Una situación, la cantidad de jugadores extranjeros, es una de las causas que llevan a la otra, 14 técnicos extranjeros, no mejores ni peores que los nacionales, pero sí con otras ideas más apegadas a sus orígenes.
Todo esto podría ser sinónimo de mejor calidad en la cancha, pero no es así, muchos de los 139 no nacidos, ocupan lugar en la banca, demostrando que su llegada a la liga MX no es por ser mejores que los que están y si están apegados al posible negocio que nace con su contratación, avalados por algún directivo, que no es dueño, por un director deportivo y un técnico, que más de las veces depende del promotor que consiguió el lugar del director deportivo y del técnico. Lo de los jugadores viene siendo pecata minuta.
Dentro de los jugadores, si hay varios que hacen diferencia con los nacionales por sus características diferentes unos. Los otros, la mayoría, solo por el hecho de formar parte de un once inicial, ya llevan ventaja, porque jugador que no juega se marchita, como si fuera planta sin agua. El ejemplo más reciente es la incorporación del mexico-estadounidense Cowell, con 20 años y pocos juegos en la MLS. Con un costo de 4 millones de dólares, será un tapón para jóvenes con un proceso de seis años como Brígido, Padilla, Puente, que necesariamente irán a la banca o serán prestados a otro equipo, con más tiempo y minutos en el primer equipo, pero con el color verde botella en su pasaporte.
De los 18 equipos, quitemos a Chivas, sin extranjeros, pero con malas decisiones en sus incorporaciones. Nos quedan 17 de los cuales, nueve tienen registrados a nueve no nacidos, tres equipos con ocho, tres con siete y uno con seis. Aún por reglamento hay espacio par que lleguen otros 13 extranjeros. Siendo apenas la fecha 1, el tiempo es propicio para su llegada.
De los equipos y el morbo que se pone desde la jornada uno, Cruz Azul tuvo la mala educación de escupir, acto no bien visto, pero lo peor es que escupió para arriba y al final le cayó encima. Esto es con respecto a la problemática con el jugador Escobar y su salida planeada. Al final, y por situaciones normales del juego, su substituto tuvo que ver en el gol de la derrota y las críticas de la afición no se hicieron esperar.
Chivas con su nuevo técnico mereció ganar. Su futbol es agradable y la salida definitiva de Vega le dará más tranquilidad a su vestidor. Mientras el técnico siga por esta línea, el equipo estará bien; si el técnico pierde el rumbo y saca al argentino que lleva dentro, los problemas llegarán. Recordar que se quedó con gente de peso fuera y dentro de la cancha y los problemas pueden llegar por ese peso fuera de la cancha con gente como Guzmán, Brizuela o el mismo Chicharo.
El América todo camina sobre ruedas, con cuadro C fue a ganar a un Xolos que cada torneo se ve peor y el crédito del Sr. Herrera, cada torneo es menor.
Pumas siguió su mismo patrón y creó que cuando se animen a jugar con Martínez y Funes Morí, el equipo se verá mejor. Tiene muy buen cuadro bajo y entonces, tener a dos buenos delanteros, totalmente complementarios, sus oportunidades aumentarán.
Monterrey lo hizo bien ante un Puebla que le sacó varios sustos y por momentos fue demasiado precavido. Al final, el Puebla estará entre los ocho mejores y Monterrey tendrá que seguir en línea ascendente.
Por último, equipos como Mazatlán, Atlas, San Luis, Necaxa, Xolos, Juárez y el mismo Santos, al no haber descenso, tendrán un torneo de varios tonos, pero sin la necesaria presión de jugar por conservar el lugar en liga MX. Esto provoca la nula competencia general en la liga, pero los 14 propietarios saben que, con una multa, que nadie sabe si en verdad se paga, conservarán su pedazo del pastel.
