Vaya estupideces las que se pueden reproducir en el ánimo de apoyar con denuedo a uno de los aspirantes con pocas posibilidades de convertirse en el secretario general de la Sección 23 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). Desde hace algunos años, cada 8 de marzo, la Secretaría de Educación Pública estatal entrega reconocimientos a trabajadoras de la educación distinguidas y ahí confluyen los agremiados del SNTE 23 y de la Sección 51, es decir, se premia a toda la población del magisterio estatal y federal. Curiosamente este año que hay elección de secretario general en el sindicato magisterial –la primera ocasión en toda su historia que será por voto secreto y directo– plumas sumamente extraviadas –que pegan con la izquierda y cobran con la derecha– sostuvieron que el acto oficial tuvo como finalidad promover a Víctor Flores Ortiz, a quien bautizaron como el delfín del dirigente saliente del SNTE 23, Alejandro Ariza Alonzo. Según los tundeteclas, muy al estilo de Burundanga (“Songo le dio a Borondongo/Borondongo le dio a Bernabé/Bernabé le pegó a Muchilanga”) en el acto no estuvo Flores Ortiz, pero fue usado por Ariza para convencer a las maestras que apoyen a su muchacho y eso lo avaló el delegado del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, Gabriel Corchado Acevedo, lo que demuestra que hay dados cargos a favor del delfín. (Ya ve cómo es el estilo Burundanga). La especie, como era de esperarse, fue acompañada por varias conjeturas estilo teorías de la conspiración y demás sandeces. Sin embargo, esta necesidad de difundir hechos falsos como ciertos dejó ver con toda claridad que existe la intención de un grupo del magisterio federal por enrarecer la elección y crear las condiciones para darle una patada al tablero si es que no salen victoriosos. Así pues, los tundeteclas al servicio del grupo conocido como Los Cupertinos –que viven de la fama y ni base tienen– pretenden crear una falsa narrativa de que existe un acuerdo entre autoridades estatales y la dirigencia nacional para imponer a Víctor Flores. Para eso también sembraron que José Luis González Morales, secretario de Finanzas saliente y candidato de Los Cupertinos, sea sujeto a un procedimiento de responsabilidades debido a que se habrían encontrado serias irregularidades en el manejo de los recursos del sindicato. Esa acción lo dejaría fuera de la contienda ipso facto. De esa forma pretende tapar la inconformidad de los agremiados de la Sección 23, la cual se hizo evidente el lunes pasado en el Consejo Seccional Extraordinario en el que hubo mentadas, rechiflas y repudio a las cuentas que ofreció González Morales. A partir de ese día, Los Cupertinos iniciaron su estrategia para vender la especie que Alejandro Ariza pretende imponer a su sucesor, cuando lo real es que Flores Ortiz –y no es por defenderlo, porque a aparte el maestro nos cae gordo– ha labrado su carrera de manera independiente y eso le granjeó la simpatía entre la base que no lo identifica con ninguno de los grupos mafiosos que han lacerado al sindicato. A diferencia del conflictivo y soberbio González, Flores es un hábil negociador que aglutinó a su alrededor a los grupos más fuertes de la Sección 23. A lo mejor eso es lo que realmente les duele y temen Los Cupertinos.
viernes, noviembre 22, 2024
