La dirigencia estatal del PAN, encabezada por Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández y un sujeto que dice llamarse Marcos Castro, recibió un balde de agua fría durante la Comisión Permanente nacional, efectuada este lunes 12 de junio, al enterarse que no serán ellos ni los yunquistas los que repartirán las candidaturas en 2024 sino el Comité Ejecutivo Nacional. En la sesión, el dirigente Marko Cortés Mendoza desgranó las prioridades de su partido las cuales inician con retener las gubernaturas de Guanajuato y Yucatán. En un segundo nivel, hay dos lugares en los que confían se pueden ganar: Puebla y la Ciudad de México, pero condicionó el triunfo a “hacer lo correcto”. ¿Eso que significa? Que el CEN panista impulsará mesas políticas de diálogo en todas las entidades para garantizar la unidad, cohesión e inclusión. Tres conceptos que son ajenos a la realidad del panismo poblano. Previo a esas mesas, el diputado federal Juan Carlos Martínez Terrazas, hombre de toda la confianza de Cortés Mendoza y actual secretario general adjunto en el CEN, se reunirá con todos los grupos para escuchar todas las versiones y no solo las de las dirigencias locales. Esta línea que asumió el PAN parte de una radiografía de todo el país, en donde prevalecen las confrontaciones y luchas fratricidas entre los grupos locales. Puebla es uno de los mejores ejemplos, lo mismo que Veracruz, en donde el propio Marko Cortés ya instaló la mesa política de diálogo debido a que dicho estado tiene el padrón más grande de todo el país. Las premisas que predominarán de cara a 2024 buscan que todos los militantes, liderazgos y expresiones sean consideradas a fin de que no haya una campaña de brazos caídos. Así pues, el Yunque -que controla la dirigencia estatal del PAN- no podrá vetar ni excluir a sus críticos, opositores ni aquellos que no simpatizan con sus principios conservadores. La apuesta del CEN es un golpe durísimo a la secta confesional porque en su estrategia pretenden tomar al partido como su vehículo para privilegiar exclusivamente a las familias custodias -al igual que lo hizo en años anteriores- y blindarlas en caso de que haya una tragedia electoral el próximo año. El mensaje de fondo es que nadie es dueño del partido y que la única forma de lograr la competitividad será con la inclusión de todos. Como le decíamos, son muy malas noticias para los yunquistas que ya se veían distribuyen a placer las candidaturas solo a sus consentidos e iniciando procesos inquisitoriales a los disidentes. Otra de las noticias que resultaron sumamente preocupantes para el CDE poblano es que se impulsará de manera prioritaria a mujeres para que sean las candidatas a las gubernaturas, por lo que no hay nada definido en Puebla ni en otros estados. Pero esa es otra historia que le platicaremos mañana.
jueves, noviembre 21, 2024
