Contrario a lo que ocurre a nivel estatal, Morena se encuentra en una difícil encrucijada en la elección de la presidencia municipal de Puebla, en donde prácticamente existe un empate técnico con la alianza Va por Puebla, ahora conocida a nivel nacional como Frente Amplio por México (PRI-PAN-PRD). El pasado 22 de junio, la empresa encuestadora Massive Caller dio a conocer su más reciente estudio sobre la capital poblana, el cual mantiene un escenario muy parecido al que detectó la firma C&E Research casi tres meses antes: No hay nada para nadie. Veamos: A la pregunta, “el próximo año habrá elecciones para alcalde en Puebla, ¿por cuál partido político votaría usted?”, 37.8 por ciento se decantó por Morena; 34.1 por ciento por el PAN; 2.5 por ciento por el PRI; 16.8 por ciento está indeciso y otros 8.8% por otros partidos (PRD, MC, PT, Verde, Nueva Alianza, Fuerza por México, PSI). Así pues, la sumatoria del PAN y PRI arroja un total de 36.6 por ciento, es decir, empate técnico con Morena. Pero al analizar un poco más los datos desagregados, Massive Caller encontró que el 22 de junio, el partido lopezobradorista registró su pico más bajo de preferencia de todo el año, a pesar de que ha contabilizado en meses anteriores hasta 42.5 por ciento. Al comportamiento errático se suma el alto número de indecisos respecto al candidato. A pregunta expresa: “Usted señaló que piensa votar por Morena en las próximas elecciones para alcalde en el municipio de Puebla. De las siguientes personas, ¿quién le gustaría que fuera el candidato de Morena?”, la sangría más grande está en la categoría “Aún no decide”, que asciende a 30 por ciento, un número muy alto si es que se le compara con el PAN que es de 7.5 por ciento. Esto lleva a una encrucijada: Morena necesita entender qué busca ese 30 por ciento de electores que está dispuesto a votar por el partido o corre el riesgo de pulverizar el respaldo con una mala selección de su abanderado. En el caso del PAN, el sondeo revela que seis de cada 10 personas que votarán por ese instituto están de acuerdo con una reelección de Eduardo Rivera. ¿Qué pasará cuándo se quite de las opciones al edil? Este panorama tan complejo de la lucha por la alcaldía obliga a los partidos a formulan las preguntas correctas para entender hacia dónde dirigirán su estrategia electoral. Nada sencillo en una coyuntura de confrontación como la que vive nuestro país.
LA BURLA DE LOS “NOTABLES”
La dirigencia nacional de Morena no deja de ir dando tumbos. Resulta que ayer dio a conocer la lista de las 21 personas que se encargarán de elaborar el Proyecto de Nación 2024- 2030, el cual busca darle continuidad a la llamada Cuarta Transformación. La iniciativa no es mala, pero termina por ser una burla al conocerse que entre los “notables” se encuentra el Dr. Muerte, también conocido como Hugo López-Gatell, a quien le debemos que el manejo de la pandemia por Civid-19 fuera un desastre y dejara —según especialistas de probada solvencia moral— alrededor de 600 mil muertos. El subsecretario de Salud es, además, uno de los responsables del fracaso del sistema de salud del país, pues dio a paso a la desaparición del Seguro Popular y la creación del Instituto de Salud del Bienestar (Insabi), el cual también dejó de existir al comprobarse que era un fiasco. ¿Qué tipo de proyecto de nación puede proponer un funcionario que en los hechos ha demostrado su sobrada incapacidad? Otro impresentable es Pedro Miguel Arce Montoya, alias Pedro Miguel. ¿Cómo se puede poner un proyecto de nación en manos de un sujeto que cuando le dieron la encomienda de recaudar y distribuir colectas voluntarias en apoyo a los damnificados por el sismo de septiembre de 2017, todo terminó en una investigación del INE por sospechas de lavado de dinero, violación a la ley electoral y anomalías de tipo bancario?
