En el periodo ordinario de sesiones que comenzará el 15 de septiembre, el Congreso del Estado de Puebla recibirá el paquete de reformas al Poder Judicial que enviará el gobernador Miguel Barbosa Huerta y que sentará un radical y firme nuevo rumbo a la relación entre magistrados, jueces, abogados, funcionarios y quienes requieren de justicia en nuestra entidad. La red de componendas se eliminará y los brazos y cabezas que la han alimentado perversamente serán cortadas de tajo.
Hoy existe, y negarlo es absolutamente inútil, un sistema contaminado que retrasa la procuración de justicia y que viola el derecho humano de acceso a la justicia.
Se arrastra un ejercicio indebido en todos los niveles del Poder Judicial, desde lo más alto hasta lo elemental, que impide, en muchísimos casos, que los pobres, los que no tienen padrinos, aquellos que carecen de ligas de complicidad, accedan a soluciones favorables en los procedimientos judiciales, que eso de sí es un grave elemento de desigualdad.
No puede decirse que ese ejercicio de magistrados, jueces, litigantes y funcionarios sea generalizado, pero sí es abundante.
La reforma que recibirá el Legislativo, luego del arranque de su periodo ordinario, es de gran calado, construida con paciencia, abundancia y a detalle. El paquete de iniciativas está listo en el escritorio del gobernador Miguel Barbosa y será uno de los sellos de su administración, la primera de izquierda en el estado de Puebla.
Tiene la estatura de legado indeleble y va a poner a muchos en el lugar que les corresponde, como chatarra en la historia.
La esencia misma es que la justicia exista, que deje de tener precio y complicidad, como hoy ocurre en tantos casos.
Hay señales que el mismo mandatario poblano ha venido dando, sobre qué buscará con esta Reforma al Poder Judicial, pero que los oídos sordos por tanta miel que los embetuna, han sido incapaces de escuchar.
“En Puebla el combate a la desigualdad es tener acceso equitativo, proporcional en todas las materias: en materia de seguridad pública, en materia de educación, en materia de vivienda, de salud, de todas las áreas en las que deben ser atendidas a cualquier ser humano, para que pueda vivir en sociedad y alcanzar un desarrollo pleno.
“Y uno de esos elementos en los que hay que luchar es el acceso equitativo a la justicia y a la procuración de justicia”, dijo el gobernador en su discurso en la Ceremonia del Día del Abogado, el pasado 15 de julio, cuando reconoció la labor del fiscal poblano y la trayectoria del magistrado José Francisco Cilia López, quien dictó la conferencia magistral “La Reforma Laboral”; sólo a ellos (ahí está el video en Facebook).
Ese día, el gobernador también destacó la coordinación, en la que participa la Fiscalía General del Estado y el Poder Ejecutivo, para llevar la atención a las 32 regiones del estado. “Antes de que termine mi gobierno, el Poder Judicial tendrá 10 nuevas sedes”.
Barbosa recordó también que se aumentó de forma importante el presupuesto del Poder Judicial y de la FGE.
Con especial énfasis, se refirió a los profesionales del derecho, privados y funcionarios públicos, así como a las escuelas de leyes, y las llamó a recuperar la ética, pues consideró que “debemos reencausar la formación de origen…”
Miguel Barbosa consideró que “(hay) el riesgo de que los profesionales del derecho dejen de tener elementos profesionales, de cultura, de protocolo, que caracterizaban al estudio de los abogados.
“Es un riesgo, no solamente porque podemos tener abogados sin la cultura necesaria… sino con el riesgo de aligerar los valores éticos de la vida misma y en el ejercicio profesional.
“Los abogados que dedican el ejercicio de su profesión a ofertarle a privados, que son los litigios, las asesorías, y los abogados servidores públicos deben estar convencidos que juntos tienen una función: la aplicación de la ley, la irrestricta aplicación de la ley y no ser deformadores de la ley… Recuperemos a la abogacía, desde donde estemos… Se vive mejor en el retiro con dignidad, que en el retiro millonario, se vive mejor…
“Faltan reformas al Poder Judicial y será una propuesta legislativa compartida… Recuperemos esa gran aristocracia que ha caracterizado al ejercicio de los profesionales del derecho, para ser los formadores de instituciones, los formadores de una sociedad que tiene que estar permanentemente revisándose, no torciéndose, no torciéndose; fortalezcamos la ley, fortalezcamos su cumplimiento y no seamos sus depredadores en beneficio de intereses particulares”.
Está muy claro, si y solo si hay capacidad de lectura y de hacer prospectiva.
Como colofón, unos versos de la canción “Doble vida”, del enorme Joaquín Ramón Martínez Sabina:
El juez justo y severo
Cada noche devuelve la toga y la ley al baúl
Y en la barra del Ángel Azul con un Chivas con hielo
Se desfoga sobando a la Chelo
Al compás de un playback de Quintero, León y Quiroga
El juez justo y severo
Al ritmo pegajoso de un bolero
En la ciudad prohibida
Olvida su disfraz de caballero
Lleva una doble vida…
