Dicen defender a las víctimas, pero no es cierto.
Y es que con esas acciones las revictimizan.
Son zopilotes comunes, buitres negros, chulos, gallinazos, jotes cabeza negra, zamuros…
Lo suyo es la carroña.
Se les conoce porque regurgitan todo.
Hasta lo que no se comen. En medio de la tragedia nunca faltan los buitres.
O los zopilotes.
Son aquéllos que se ceban en la desgracia y celebran los muertos producidos por los conflictos.
Si alguien muere linchado —como fue el terrible caso de Papatlazolco—, suben fotos y videos sin el menor escrúpulo.
Dos amigas toman café. La escena transcurre en una terraza de conocido restaurante poblano.
—¿Supiste que el diputado federal le pegó a su mujer?
—Su exmujer, ¿no?
—¿Te enteraste?
—Ella me lo contó.
—¿No es su mujer?
—Es su exmujer.
—¿Sigue siendo diputado?
—Sigue siendo.
—¿De qué partido es?
—De Morena.
—Ahhh. Ya sé quién es. Es primo o sobrino de aquél.
—Algo así.
—¿Y cómo está ellla?
—Golpeada.
—Uyyy.
—Humillada.
—¿Dolida?
—Muy.
—¡Pinches hombres!