Prefacio
El martes 28 de junio de 2022, en el Salón Barroco del Edificio Carolino de la BUAP, Pedro Ángel Palou García presentó su más reciente novela: México. La novela.
Andrea Rivas, Iván Hernández, Juan Gerardo Sampedro, Miguel Maldonado, Juan Cruz y el que esto escribe fuimos sus presentadores.
Este es el texto que leí hace unos días.
I
A Pedro Ángel Palou lo conocí en Casa del Escritor gracias a un curso que impartió, aún como secretario de Cultura, en el sexenio del exgobernador Melquiades Morales Flores.
Pedro sabía ser secretario de Cultura, escritor y guía literario al mismo tiempo.
Luego -no es queja ni reclamo- a la par, por su culpa, decidí estudiar Literatura y realizar mis pininos de gestión cultural como estudiante.
Cuando lo conocí -no me da pena reconocerlo- era un lector “casi virgen”, por decirlo de una forma, y hoy -gracias a su guía- he leído lo que muchos compañeros y compañeras de mi generación no han logrado. Estoy seguro.
II
A la par que iba forjando una amistad basada en la enseñanza, la lealtad y diversas complicidades (como el fútbol), iba leyendo la obra de Pedro.
A partir de allí me nació una afición: leer a escritores vivos para después salir en su caza y así conocer de viva voz (y al calor de las chelas) desde dónde, cómo y por qué escribieron su poema, novela, ensayo o cuentos.
III
Carlos Monsiváis solía decir que para leer Terra Nostra de Carlos Fuentes necesitarías una beca. En sí, para leer a todo Fuentes habría que pedir un apoyo del extinto Fonca.
Recordando esa anécdota, no mentiría si digo que: para leer, en estos momentos, lo que lleva publicado Pedro: ya necesitarías una beca.
México. La novela es (sin contar reediciones) si las matemáticas no me fallan: su libro número 50 publicado.
Novela corta, de largo aliento, cuento, ensayo, cuento infantil y poesía son los géneros por los que Pedro ha navegado.
IV
México. La Novela no sería posible, es algo que seguiré insistiendo, si Pedro no hubiera escrito Quién dice sombra; un tour de force o viaje al chiclocentro de la generación de los escritores poblanos que fueron tallereados por Donoso/Ojeda.
De algo se desprendió en la escritura de dicha novela que le permitió fluir mejor en su escritura.
Luego, sin duda, esta la especie de reconciliación y pasión por la Historia que, seguramente, le heredó Don Pedro, permitiéndole así unir la herencia con su esencia.
V
México. La Novela es hija de: La culpa de México, El fracaso del mestizo, Zapata, Morelos, Cuauhtémoc, Pobre Patria Mía, Tierra Roja y No me dejen morir así.
En todas estas novelas, estoy seguro, se fue cocinando la más reciente novela de Pedro.
VI
México. La Novela es, sin duda, su proyecto más ambicioso.
Me gusta que uno va creciendo con los personajes y la Ciudad de México.
Me maravilla que la voz, el estilo y forma de hablar de los personajes va evolucionando según la época.
La capacidad de sintetizar en algunos años y en pocas páginas lo acontecido en cinco siglos es un atrevimiento del que sale bien librado.
VII
Tampoco me hagan mucho caso.
No puedo ser imparcial con esta lectura, pues habla de Ciudad en que anhelé vivir y lo hice por casi 4 años, una ciudad a la que regreso cada que puedo; aquí, también se habla del papel que jugaron las logias masónicas en la construcción/destrucción del país y la CDMX. Temas que me apasionan con singular alegría.
El superhéroe (del que habló Nietzsche) es el que logra reconstruirse, ante la desgracia, sin perder la esencia. Y eso es la CDMX.
VIII
Hace años que detestó la formalidad y aquí -en esta presentación- hay mucha.
Va un poco de mi toque, una broma, que es una forma cariñosa decirte: Pedro: ¡Gracias por todo y nada!
Pedro sabe ser padre, guía, lector, escritor, amigo, profesor, espectador de fútbol; pero aún no logra desdoblase como Dr. Stange; más bien, me lo imagino como un Snoopy (al menos, cuando escribe y lee para su nueva novela; al mismo tiempo que prepara su siguiente clase) que escribe y escribe y escribe como desesperado.
Pedro: si algún día lograrás convertirte en Dr. Strange, ponme en ese universo donde juego para el Puebla e inscribo mi nombre en su Historia como uno de los jugadores que lo hizo campeón.
