I
Mi acercamiento al mundo cultural y literario se dio cuando tomé talleres literarios en Casa del Escritor y al poco tiempo conocí y me hice amigo de Pedro Ángel Palou; prolífica pluma poblana e integrante de la Generación del Crack.
A través de él conocí y leí a Ignacio Padilla (¡cuánto se te extraña!), Jorge Volpi, Eloy Urroz.
Conforme me adentré en el ámbito literario -como lector y gestor- fui conociendo los aportes que lograron generaciones como Los Contemporáneos, la Generación de Medio Siglo o Generación Casa del Lago. Entonces, nació un sueño: ser parte de un grupo, una generación así.
II
Quizá por eso, siendo estudiante del Colegio de Lingüística y Literatura Hispánica de la BUAP, fundé con un grupo de amigos: La Fuga Literaria, una suerte de homenaje al Crack y a Sergio Pitol; cuyo objetivo era: realizar eventos culturales en Puebla con la presencia de grandes plumas nacionales.
Funcionó y su aporte tuvo.
Hoy muchos de los amigos que apoyaron el sueño, se dedican a otra cosa ajena al mundo cultural.
III
Durante los años, casi cuatro, que viví en la CDMX asistí a la exposición: Los Contemporáneos y su tiempo, la cual se exhibió en la sala principal del Palacio de Bellas Artes y volví a sentir ganas de ser parte de algo así.
IV
A unos meses de terminar el 2020 y en un lapsus triste para mí, encontré cobijo en Revista Purgante.
Primero comenzaron a publicar mis reseñas, tiempo después me anexaron al grupo de autores constantes de Purgante y fui siendo parte de las secciones colaborativas. He escrito sobre cine, sobre series de Netflix o Amazon, sobre Música.
Purgante es un gran diversificador para mi vena creativa.
Es fácil aventarse al vacío cuando tienes la plena seguridad de que alguien te acompaña en el vuelo y otros te reciben para evitar una estrepitosa caída.
Purgante ha sido el espacio donde me he animado a darle voz a la poesía que llevo años guardando en los archivos de la computadora y que, salvo contadas personas, pocos sabían que escribía.
Hoy, a un año de distancia, sé que Purgante comienza a ser y será todo eso que soñaba tener: un grupo de cómplices, amigos, una generación creativa que vuela en conjunto.
V
Hoy, hay un libro antológico llamado Puentes (publicado por Editorial Gato Blanco) que reúne el alma de Purgante. Contiene poesía, historias, charlas; entre otros textos.
Nos acompañaron (una suerte de padrinos) las plumas de: Tanya Huntington, Santiago Tejedor, Paula Vázquez, Rubén Cortés, Carla Faesler, Santiago Hernández Zarauz, Tamara Crespo y Domingo Marchena.
Puentes reunió, convocó, autores de Perú, Uruguay, Brasil, España, Cataluña, Cuba, Venezuela, Colombia y México.
VI
Ahora, se viene un proyecto más grande: la creación y nacimiento de: Editorial Purgante.
Rubén Cortés (padrino y amigo de Purgante) y quien ya nos ha bautizado como: Generación Purgante; ha confiado en nosotros y él será el primer autor que se publique dentro de Editorial Purgante: Carteles de invierno. Viajes con mi hijo.
A muchos de los que formamos parte de esta Generación Purgante: amamos viajar y plasmar la experiencia en un cuento, un poema, un relato o una crónica.
Porqué leer es viajar y escribir también.
Purgante es una estancia all inclusive al mundo de la literatura y la amistad.
¡Larga vida a Purgante!