Dicen que las regiones que se atreven a imaginar el futuro terminan construyéndolo. Puebla como Estado, tradicionalmente reconocido por su historia, su arquitectura y su gastronomía, decidió dar un salto de época: convertirse en “Epicentro Tecnológico de México”.
El Tech Capital Puebla Summit 2025, celebrado del 15 al 17 de octubre en el Centro Expositor, no fue un evento más de tecnología. Fue, más bien, una declaración política, económica y educativa: Puebla no solo quiere adaptarse al cambio digital, quiere liderarlo.
Un evento que marca un antes y un después
El gobernador Alejandro Armenta lo resumió con claridad: “Los países que invierten en tecnología son los que lideran el futuro”. Y Puebla quiere estar entre ellos. El Summit reunió a más de 60 expertos internacionales en inteligencia artificial (IA), internet de las cosas (IoT), ciberseguridad y automatización. Participaron miles de asistentes presenciales y virtuales, entre estudiantes, emprendedores, empresas y representantes de gobierno.
Lo más interesante: fue un evento gratuito, con talleres, conferencias y exhibiciones. Una apuesta fuerte por democratizar la tecnología, llevarla más allá de las élites empresariales y convertirla en herramienta de desarrollo.
Los ejes del Tech Capital Summit
El programa se estructuró en cuatro grandes líneas:
1.- Puerta al Futuro: sobre tecnologías disruptivas y sus implicaciones sociales.
2.- IA para la Vida: aplicaciones de inteligencia artificial en salud, educación y empresa.
3.- Todo Conectado: exploración del Internet de las Cosas y la hiperconectividad.
4.- Transformación Digital: herramientas para estudiar, emprender y digitalizarse.
Entre los proyectos más comentados destacó un sistema de IA capaz de diagnosticar enfermedades en bebés a partir del llanto, desarrollado por jóvenes investigadores poblanos. Ejemplo perfecto de cómo la innovación local puede tener impacto global.
La doble apuesta de Puebla
Puebla está moviendo sus fichas en dos tableros complementarios:
1.- Convertirse en el hub tecnológico del sur-sureste mexicano. Atraer inversión, talento y universidades, para posicionarse como un nodo clave en la economía digital nacional.
2.- Promover un desarrollo con sentido social. Que la tecnología sirva para incluir, no excluir. Que los jóvenes de cualquier origen puedan acceder a formación, empleo y oportunidades.
La Secretaría de Economía y la de Innovación, Ciencia y Tecnología estatal impulsaron la creación de espacios de vinculación entre gobierno, academia y empresa, un modelo que busca transformar la educación y la industria desde la colaboración.
Lo que está en juego
El Tech Capital Summit no solo es un evento vistoso; es una apuesta por el futuro:
Para los jóvenes: representa una oportunidad real de aprendizaje, vinculación y emprendimiento.
Para la economía local: puede atraer empresas de alto valor agregado y reducir la fuga de talento hacia la CDMX.
Para México: descentraliza la innovación, expandiendo el ecosistema tecnológico fuera de los grandes polos tradicionales.
Si Puebla consolida este modelo, podría sentar las bases de un nuevo tipo de desarrollo regional: uno basado en conocimiento, creatividad e inclusión.
Los grandes retos que se pueden lograr.
Pero toda apuesta conlleva retos.
1.- Mantener el impulso después del Summit en Puebla.
2.- Crear mecanismos que garanticen que las startups y proyectos presentados se traduzcan en empleo y competitividad real.
3.- Asegurarse de que la tecnología llegue a todos. Porque la brecha digital todavía es profunda en muchas zonas de Puebla y del país, pero se puede reducir y borrar esa brecha, así como lo han logrado otros países o Estados como California con Silicón Valley.
El entusiasmo es tangible, pero la consolidación requiere continuidad, inversión sostenida y métricas claras de impacto: empleos generados, empresas creadas, innovación aplicada y estoy seguro que en Puebla lo lograremos.
Conclusión: Puebla ha dado el primer paso.
Puebla ha decidido dejar de mirar desde la tribuna. Está saliendo a la cancha del futuro con una visión clara: la tecnología como motor de desarrollo humano y económico.
El Tech Capital Puebla Summit 2025 puede ser recordado como el punto de partida de una nueva era para el estado, si el impulso se aprovecha, Puebla será un ejemplo para México, Latinoamérica y el mundo.
A quienes viven, estudian o emprenden en Puebla, la invitación es directa: participen. La innovación no ocurre sola. Este es el momento de aprender, conectar y crear. Porque el futuro —ese del que tanto se habla— ya está aquí, y esta vez, tiene código postal poblano, ¡que Viva Puebla!
Gracias por leernos.
Tu amigo Daniel Conde

