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domingo, noviembre 24, 2024

El Todos Santos que se fue, presentación de libro y las calaveras de Xicotepec

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 QUINO

 

 

Los días de plaza en casi todas las comunidades y municipios de todo el país que anteceden a la festividad de Todos Santos o Día de los Fieles Difuntos son de por lo menos cuatro plazas. Se ofrece todo lo relacionado a la organización de la fiesta: camotes, chayotes, calabaza, yuca, mandarinas, limas, caña de azúcar y todos los ingredientes que llevan el mole, el pascal y los tamales. En las localidades es toda una semana de fiesta, empiezan a cocinar tamales —en sus distintas variedades—, pascal, mole y en la mesa de las ofrendas están llenas de “todo lo que le gustaba al difunto”. Mi mamá QEPD, toda una semana previa, se la pasaba con los preparativos y las dos noches anteriores al Día de Muertos casi no dormía. El año pasado esta fiesta se vio apagada por la pandemia y ahora que ya casi se sale de la misma el mercado y las tiendas abarrotadas de gente estuvieron. Quedó atrás esa queja de que no hay dinero, las personas ven como le hacen, empeñan cosas, venden su ganado de traspatio, etc. Todo lo que puedan hacer, menos dejar de hacer la gran fiesta. Al fin que solo una vez al año vienen a visitarnos aseguran.  En las instituciones educativas y salones de fiesta los jóvenes se destramparon. Fiesta de disfraces, pasarelas, concursos, etc. Desde los jardines de niños hasta las universidades participaron fin con toda libertad. Los ayuntamientos hicieron lo propio, unos con limitaciones y otros echando la casa por la ventana, unos con la de sus áreas de cultura y otros sin participación o demasiado limitada.

El jolgorio volvió a ser presa de los serranos, los citadinos acudieron a librarse de todos los inconvenientes que implica vivir en las grandes ciudades, a tomar aire puro, a desembarazarse de las prisas matutinas, de los hurtos, inseguridades, etc.

Se fueron los difuntos y dejaron con buen sabor de boca a los comercios que en algún tiempo estuvieron a punto de “quebrar” y reactivaron sus negocios. Café y pan fue la carta fuerte en todas las casas para recibir a los visitantes, como buenos anfitriones.

Hablando de anfitriones, el pasado día 29 de octubre en La Choza, que se está convirtiendo en un espacio por excelencia para la presentación de libros, fui invitado por Esperanza Gómez Salas, una ilustre Xicotepequense que presentó: Villa Juárez, una novela histórica. En su alocución dio a quienes estuvimos una serie de datos que es necesario conocer por las nuevas y no tan nuevas generaciones. Sin duda, un trabajo de investigación muy importante, ya que retrata precisamente al pueblo en el que existían pocas casas, que el palacio actual estaba en un espacio mas pequeño a los costados dos casas habitación grandes, relataba que la energía eléctrica era muy deficiente y que, a decir de un presidente municipal, el finado Porfirio Díaz visitó a Xicotepec. Son solo mínimos apuntes que me permito dar a conocer y que puedan adquirir este valioso libro precisamente en Casa Gómez.

Las calaveras como medio de expresión fueron reprimidas en sus orígenes durante el siglo XIX, debido a las burlas hechas a los gobernantes. Para entonces, los periódicos alrededor del mundo realizaban ya caricaturas de burla de los políticos y miembros de las casas reales.

En la actualidad pocos gobernantes municipales se atreven a organizar concursos de este tipo debido a que son el principal foco de atención y critica.

En Xicotepec, el Comandante Oreste tiene mucho tiempo escribiendo versos alusivos a personajes o a algún tema en específico. A partir de la emisión pasada de El baúl, ya se hizo presente y en estos días no pudo haberse quedado ausente, ya que como decían nuestros ancestros este tipo de escritura es su mero mole.

Con ese motivo hoy nos obsequia algunas calaveras:

 

CARLOS BARRAGÁN AMADOR

En un careto famoso

que le costó millonada

jugó una mal pasada

porque no le dio reposo                    un respingo dio en el pozo

el demonio se vengaba

pues creyendo que ganaba

el alma apostó con él

perdió de manera cruel

cuando apenas empezaba.

 

 

 

REFUGIO REBOLLO

Aplicando dulce o truco

el buen Refugio rebollo

se quiere comer un bollo

que se le atraganta a Cuco,

y tomando solo zuko

a una morena pedía

a Carlos se lo ofrecía,

por módica comisión

que lo llevan al panteón

cuando ya la recibía

 

 

 

MI XICO

 

Parece que va a llover

algo irónico decía

viene buscando el sí a,

a su careto poner

y recordando el ayer,

se le arrima a la moruna

que le dará la fortuna

si se baja a su nivel

porqué tiene frente de él

un hacedor de fortunas

las calacas oportunas

lo pueden hacer caer.

 

PRI

Hoy lo van a sepultar

la calaca y sus traiciones

le van a faltar millones

pa’ lograrlo rescatar.

Dilapido su caudal

Con erróneas decisiones

Que los cabritos cabrones

Aprendieron a saltar.

 

Requiescat in pace

 

MARIO ALBERTO MEJÍA

 

Lo buscaba la calaca

en los montes y la sierra

lo vino a hallar en su tierra

ya muy famélica y flaca,

que sonaba cual maraca

a cada paso que daba,

y don Mario le decía

lo dijo la profecía

que en el quinto se lo daba,

Y su columna tecleaba

para un hipócrita atento

que le brinda su sustento

Quinta Columna leyendo.

 

LEONEL QUIROGA CAZARES

 

Que se murió Don Leonel

en el taller se decía,

repasando el silabario

la flaca cargo con él

que ya descansa Leonel

y su taller literario…

 

LA PGR

En geriátrica reunió

estaban muy campechanos

conbebiendo muy ufanos

cuando se fue muy cabrón

no les pidió ni perdón

pero jalo su guitarra

se fue el Tito y su guarra

al patético panteón

se la mamo ese mamón

se le quebró su guitarra…

 

en un rincón el chupiro

sollozando sin recato

se fue para mucho rato

jalándosela en un suspiro

tocando ya sin respiro

ensayando para un trio

con un tito ya sin brío

que lo jala de la pata

pues a él si sobra nata,

yo voy comadre soy giro.

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