Las autoridades sanitarias de todo el mundo están alerta tras haber identificado un brote de hepatitis infantil del cuál aun se desconoce el origen, y que se reportó por primera vez en Gran Bretaña, pero con el paso de los días se ha detectado también en el resto de Europa y en Estados Unidos.
Esta rara enfermedad hepática ha afectado principalmente a niños entre los dos y los siete años y, de acuerdo con el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, se ha descartado que la enfermedad haya sido provocada por los virus comunes que causan la hepatitis.
Asimismo, se ha excluido la posibilidad de que la enfermedad esté relacionada con la vacuna contra COVID-19, ya que la mayoría de los niños afectados tienen menos de cinco años y no han sido vacunados.
La OMS ha lanzado una alerta sanitaria internacional porque ha detectado un aumento drástico en los casos de hepatitis aguda en niños alrededor del mundo.
De acuerdo con las últimas cifras de esta organización internacional, se han detectado al menos 74 casos de niños que contrajeron hepatitis o presentaron inflamación del hígado en Gran Bretaña, 3 en España y ahora las autoridades de salud de Estados Unidos informaron que investigan 9 casos similares.
Estos 9 casos se presentaron en Alabama, donde los funcionarios de salud reportaron que cada uno de los menores dio positivo a adenovirus y están estudiando su relación con el adenovirus 41, que generalmente está vinculado con inflamación estomacal.
Ahora que esta enfermedad se ha detectado cerca de nuestro país, debemos estar atentos y preparados para evitar que los contagios lleguen a nuestra población y en caso de que se detecten, podamos actuar a tiempo y contenerlos.
Además, debemos estar al pendiente de los síntomas que los niños y las personas afectadas por este brote de hepatitis suelen presentar: dolor abdominal, vómito, diarrea, ictericia (color amarillento en la piel y en los ojos), orina de color marrón oscuro, heces de color claro, fiebre, cansancio, dolor de músculos o articulaciones, falta de apetito durante varios días y pérdida de peso.
Por otra parte, la agencia de salud de Naciones Unidas ha anticipado que con el incremento de los casos en el último mes y el aumento de la vigilancia, es muy probable que se descubran más casos antes de que se logre identificar la causa de esta rara enfermedad.
Sea cual sea el origen de este brote de hepatitis en niños, hay medidas que nos ayudarán a prevenir el contagio (y que son las mismas que nos ayudan a prevenir la Covid y cualquier otra enfermedad): la higiene de manos, el uso de cubrebocas, así como evitar compartir botellas o utensilios con otros niños y el estornudo de etiqueta.
Este acontecimiento insólito, que aún no se presenta en nuestro país, es un recordatorio muy importante de que no debemos bajar la guardia. La forma más efectiva de prevenir cualquier enfermedad es continuar con las medidas de prevención e higiene, así como contar con nuestros esquemas de vacunación completos, sobre todo, el de los niños más pequeños.