“Un fraude”, “un fracaso rotundo”, “los reprobamos y no los queremos volver a ver”, fueron los calificativos que expresaron el Consejo Nacional de Organismos Empresariales y el Consejo de Comerciantes del Centro Histórico a la gestión encabezada por Eduardo Rivera Pérez y Adán Domínguez Sánchez que concluirá en un par de meses.
Consideraron que los baches, el sistema de drenaje, el ambulantaje y la falta de seguridad pública, son algunos de los reflejos más evidentes de lo que muchos consideran una falta de gobierno efectiva durante su mandato.
César Bonilla, presidente del Consejo Nacional de Organismos Empresariales (COE), no ocultó su descontento al declarar: “Los reprobamos y no los queremos volver a ver”, mientras que el presidente del CCCH, José Juan Ayala, fue tajante al calificar la gestión de Adán Domínguez y Eduardo Rivera como un “fraude”, pues expresó que las promesas de mejora en la infraestructura y en la gestión del comercio ambulante quedaron en el aire, lo que les costó un 20 por ciento en las pérdidas de ganancias.
Bonilla lanzó una seria acusación contra funcionarios del Ayuntamiento de Puebla, señalando un alarmante incremento en los casos de corrupción y extorsión de entre un 50 y un 100 por ciento en los últimos seis meses, justo en el periodo que Adán Domínguez tomó el control del municipio.
Expuso que constructores, inmobiliarios y comerciantes están siendo extorsionados por funcionarios municipales, quienes exigen pagos adicionales que van desde 3 mil hasta 5 mil pesos para agilizar trámites necesarios.
Estas cuotas no oficiales, exigidas por la expedición de licencias de construcción y la terminación de obras, han provocado una parálisis en la comercialización de viviendas y la disponibilidad de créditos, según los empresarios afectados.
El empresario expresó su preocupación por el hecho de que esta situación persista a casi dos meses antes de que concluya el actual gobierno municipal, encabezado inicialmente por Eduardo Rivera Pérez y luego por Adán Domínguez.
“No es bonito ser extorsionados y caer en una red de corrupción, pónganse en los pies del constructor, le está comiendo a lo mejor un crédito que utilizó para construir las casas y no puede desperdiciar un solo cliente. Entonces, prefiero pagar 5 mil pesos a perder un cliente que me va a ingresar 1 millón de pesos a mi cuenta para que yo haga frente a intereses, a compromisos de la construcción”, manifestó.
El representante del COE manifestó que temen que antes de concluir la administración, los inspectores municipales adopten una actitud más severa, al aprovecharse de las fallas en la gestión administrativa para imponer sanciones a los negocios que no han podido finalizar sus trámites a causa del cierre temporal de oficinas gubernamentales.
A la par, expuso que problemas como las obras que dejarán pendientes de concluir y otras más que tienen pésimos materiales, son otras de las herencias que el gobierno municipal panista dejará en la capital poblana.
Por otro lado, la decisión del gobierno municipal de cerrar algunas calles del Centro Histórico para desalojar a los ambulantes ha provocado una caída en las ventas de hasta un 20 por ciento en la zona, según denunció José Juan Ayala.
El presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico hizo un llamado urgente al alcalde sustituto para reabrir las vialidades cerradas, pues expuso que si no cuentan con la capacidad para solucionar el problema del ambulantaje, no tiene sentido mantener las calles bloqueadas cuando está siendo perjudicial.
El líder empresarial criticó que el cierre de calles no solo ha generado pérdidas económicas, sino que también ha contribuido a un aumento en la contaminación en la zona. En particular, señaló que el sector papelero ha visto una disminución en sus ingresos del 10 al 15 por ciento, justo cuando esperaban un repunte del 50 por ciento debido a la temporada de regreso a clases.