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domingo, noviembre 24, 2024

Liga MX castiga violencia en Querétaro con veto a barra visitante

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El partido de la jornada 9 entre el Querétaro y el Atlas, se transformó en una barbarie que arrasó con vidas humanas. Un conato de pelea que empezó en las tribunas entre barristas de ambos equipos, concluyó en una de las tragedias más grandes del fútbol mexicano, dejando hasta el momento un saldo de 22 heridos, varios de ellos de gravedad, y 17 muertos. 

La inexistente seguridad pública y privada en el estadio, la absurda justificación del gobierno de Querétaro y la clásica respuesta de la Liga Mx para investigar los hechos e imponer sanciones, ha vuelto noticia mundial al fútbol mexicano por el reflejo de la violencia que asfixia al país, la cual llevó a aficionados a matar a golpes a compatriotas, sólo por portar una playera diferente a la suya. 

El mensaje de la Liga “Grita x la Paz” fue pisoteado el pasado sábado en el estadio de Gallos Blancos a partir del minuto 60, cuando barristas del rojinegro fueron enfrentados por aficionados queretanos. Todavía con la pelota en juego, en la transmisión oficial de Fox Sport se logra ver un río de aficionados de azul y negro corriendo por los pasillos de la Corregidora para “ayudar” a su gente. 

Como era de esperarse, el partido se detuvo cuando decenas de aficionados ingresaron al terreno de juego. Padres de familia con sus hijos salieron corriendo para evitar ser objeto de una agresión; niños y mujeres tuvieron que esconderse entre las butacas para evitar ser víctimas de la barbarie. 

Lo que pasó en la Corregidora escaló a un nivel de brutalidad horas más tarde. La pelota ya corría en Monterrey, cuando en Twitter y Facebook se divulgaron imágenes y videos de aficionados atlistas, completamente desnudos y ensangrentados, que yacían inertes en los pasillos externos de las tribunas o a unos pasos de la cancha. 

 

Deficiente seguridad 

Como en cada partido, existe una mesa de seguridad que se encarga de planear la logística días antes del evento. En la misma, se analizan posibles riesgos y se toma en cuenta qué porra visitante llegará al estadio, y cuál es el boletaje estimado de venta, con el fin de definir los protocolos de emergencia en caso de incidente o riñas. 

En Querétaro este procedimiento parece haber sido pasado por alto, o de nada sirvió la pobre planeación de los empresarios, y de esto se dio cuenta en las redes sociales. En las imágenes no se aprecia ni un solo policía municipal, estatal o fuerza del orden pública o privada en el estadio. 

Otros guardias incluso fueron artífices o cómplices de la barbarie. Hubo un guardia que permitió el paso a los aficionados de Gallos para arrinconar a los atlistas, otros que presenciaron como un grupo de “animales” golpeaban a un ser humano y se hacían de la vista gorda. 

 

¿Y las sanciones? 

Pasaron cinco horas para que el presidente de la Liga, Mikel Arriola, fijara una postura sobre el lamentable hecho. Y lejos de aceptar que fueron rebasados, y de entregar información real sobre los sucesos, la máxima autoridad de la Liga MX optó por la mentira y justificación. Ofreció un mensaje tibio y de cero tolerancia. 

“Este problema de hoy se tiene que revisar, desde cuántos elementos de seguridad pública y privada había en el estadio. Lo que se genera es que una barra rompe un cerco muy débil y se enfrentan a la otra barra y allí es donde las cosas se salen de control, se da la invasión a cancha”, dijo Arriola en entrevista para Fox Sports. 

Hasta ayer, finalmente se tomó una decisión: las barras visitantes no volverán a pisar un estadio de Fútbol. La sanción penal, por otra parte, quedará en manos de las autoridades judiciales del estado.

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