La fecha de sentencia de Ismael Zambada García, conocido como El Mayo, ex líder del Cártel de Sinaloa, ha quedado oficialmente establecida para el 13 de abril de 2026 a las 10:00 horas, según informó la corte de Brooklyn, Nueva York. Esta decisión del juez Brian Cogan llega después de que la defensa del narcotraficante solicitara un aplazamiento de tres meses para completar un informe previo a la sentencia, debido a las complicaciones logísticas generadas por la violencia que atraviesa México.
Este informe tiene como objetivo presentar elementos atenuantes que puedan reducir la severidad de la condena de Zambada, que podría ser de prisión de por vida. Entre estos elementos suelen incluirse cartas de familiares, amigos y personas cercanas al acusado, quienes abogan por una pena más benévola.
El equipo de defensa de El Mayo, encabezado por Frank Pérez, deberá presentar su informe final antes del 30 de abril de 2026, mientras que la fiscalía estadounidense tiene hasta el 6 de abril del mismo año para entregar su propio informe pre-sentencia. El aplazamiento fue concedido para dar tiempo a que los abogados reúnan la evidencia necesaria, particularmente aquella proveniente de México.
Zambada García se declaró culpable en agosto de 2023 de dos cargos relacionados con el crimen organizado, lo que fue confirmado en una audiencia celebrada en la Corte Federal de Brooklyn. Tras su admisión de culpabilidad, la Fiscal General de los Estados Unidos, Pamela Bondi, destacó que Zambada pasará el resto de su vida en prisión debido a la magnitud de los crímenes que cometió durante décadas de actividad criminal.
En su declaración, El Mayo detalló cómo comenzó su carrera en el narcotráfico en 1969, a los 19 años, y cómo se fue convirtiendo en uno de los líderes más temidos del Cártel de Sinaloa. Admitió su responsabilidad en tráfico de drogas, asesinatos y sobornos a autoridades mexicanas, acciones que contribuyeron a la expansión del cártel a nivel global.
Zambada también reveló en su defensa que fue secuestrado por Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo, quien lo entregó a las autoridades estadounidenses como parte de una trampa para obtener beneficios para él y su hermano Ovidio Guzmán. Según el capo, fue trasladado en contra de su voluntad desde México a Nuevo México en 2024, donde finalmente fue entregado a las autoridades estadounidenses.
La solicitud de aplazamiento fue presentada por el abogado de Zambada, Frank Pérez, el pasado 9 de diciembre. Pérez argumentó que la violencia en México ha complicado la recolección de pruebas y la obtención de testimonios clave de familiares y testigos que podrían ayudar a reducir la condena del narcotraficante. La inestabilidad en el país ha retrasado las comunicaciones y dificultado la organización de reuniones con las personas que podrían interceder en favor de Zambada.

