En una acción inédita, con aires amenazantes, gritos, lágrimas y vituperios, Antonio Valente Martínez, mejor conocido como “El Toñín” —quien acumula decenas de carpetas de investigación por huachicoleo, entre otras cosas—, se fue encima de Samuel Aguilar Pala, secretario de Gobernación, a través de un video en Facebook (difundido este martes) en el que aparece con su hija, Guadalupe Martínez Gerardo, presidenta municipal de Quecholac, municipio que forma parte del denominado “Triángulo Rojo” de Puebla por la alta incidencia de robo de combustible.
Un día después (este miércoles), el Toñín anunció que iría a tratar de levantar el bloqueo de la autopista (que hasta el cierre de esta columna ya acumulaba más de diecisiete horas) y reiteró los señalamientos en contra del secretario de Gobernación, aunque llenó de elogios (sin mencionar su nombre) al diputado local por el distrito 15: Andrés Villegas.
Cosa curiosa: a Aguilar Pala lo amenazó en repetidas ocasiones, pero a Villegas le colgó varias medallas por su “gran papel”.
El mundo al revés.
También dijo estar dispuesto a morir por el movimiento en defensa del agua (motivo por el cual fue cerrada la autopista) y a que las autoridades estatales lo llenen de falsas carpetas de investigación en aras de aprehenderlo.
(Igualmente, dijo que le pedirá a su hija que acuda con un psicólogo para recibir terapia).
A las 9:37 de la mañana de este miércoles, José Luis García Parra, coordinador de Gabinete del gobierno de Puebla, subió un tuit revelador: “De no creerse! ‘Medios de comunicación’ refiriéndose a un delincuente Huachicolero como ‘afamado agricultor’. De ese tamaño es su cinismo. Seguiremos poniendo #orden en #Puebla. Nadie por encima de la ley”.
Le dejo al hipócrita lector una crónica rápida del video amenazante.
Son las 6 de la tarde con 4 minutos del martes 2 de diciembre cuando “El Toñín” inicia una transmisión de Facebook junto con su hija: Guadalupe Martínez Gerardo, presidenta municipal de Quecholac.
El inicio es aparentemente sereno, pero se irá descomponiendo hasta culminar en una serie de dichos y señalamientos peligrosos y amenazantes.
Todo inició con el bloqueo de la autopista Puebla-Orizaba en la zona de Quecholac, y con una llamada telefónica realizada por el secretario de Gobernación, Samuel Aguilar Pala, en aras de que ella contribuyera a solucionar el conflicto.
Ante esos hechos, surge el citado Facebook Live.
Con el ceño fruncido, de gorra, el “afamado agricultor” (¡así lo llama un sector de la prensa poblana!) inicia su mensaje con cierta tranquilidad, aunque de entrada se dice indignado por la “violencia política de género” que acababa de sufrir, dice, su hija.
Ésta, visiblemente afligida, revela que el secretario de Gobernación le habló por teléfono para que solucionara el conflicto.
El Toñín, golpeando una mesa de cristal, le corrige la plana conforme ella habla:
“A ver, hija, te noto muy nerviosa. ¡Explícate bien! (…) ¡tú no eres competente para eso! (para solucionar el bloqueo)”.
La presidenta municipal continúa su relato y enfatiza que el maestro Pala (como es conocido) le había dicho: “Resuelve el conflicto. Ahí te encargo, es tu zona. Además, tu papá está involucrado”.
En ese punto, ella eleva la voz: “¡fue cuando más me saqué de onda!”.
Y dice que negó por teléfono el dicho del secretario.
El Toñín interrumpe de nuevo: “¿Es una fabricación de un delito? ¿Tienen pruebas?” (en alusión a la autoría del bloqueo carretero).
Y pasa a revelar algo perturbador: “Una vez, con ese Higuera (Gilberto Higuera Bernal), el exfiscal… Yo se lo dije así: ¿tienen pruebas? Exhíbanlas. Pero que sean pruebas reales, no fabricadas. Me fabricaron delitos. Y yo creo que no queremos vivir el tiempo del exbarbosismo”.
Guadalupe Martínez interviene: “Así es. Eso es lo que me preocupó. Yo no quiero regresar a los tiempos de ese exgobernador. (Se le quiebra la voz) me sentí intimidada”.
El Toñín agrega: “Pues de hecho es tipo amenaza contigo. (…) Tú no serás víctima de nadie. Estamos en contra de la violencia de género. Tú no eres responsable ni yo soy responsable. (…) ¡Me duele a mí en el alma que a mi hija me la quiera amedrentar el secretario de Gobernación! (Eleva el tono de voz). ¡Ten respeto porque a lo mejor tú tienes también hijas, y si le hablaran a una de tus hijas así sentirías el dolor que siento yo! ¡Y la rabia y la impotencia, cabrón! (Se sulfura, manotea). ¡Ten respeto, cabrón! ¡Hoy estás arriba y mañana puedes estar abajo, cabrón! ¡Entiende! ¡Y no pierdan el poder que se les da porque el poder se los dio la gente! ¡Por dios, de madre, no lo pierdan, cabrones! ¡Le dimos (ininteligible) pa’ que estén arriba, no pa’ que nos aplasten! ¿Somos agricultores? ¡Sí somos! ¿Que nos vieron en una camioneta buena? (Se le quiebra la voz y golpea la mesa de cristal). ¡Pues nos hemos partido media madre, cabrones! (Llora). ¡Hijos de la madre! (Su hija le toma la mano en señal de apoyo). ¡Mamones! (Dirigiéndose a su hija) ¡Si ella tiene sueños y quiere seguir adelante… ¡Total, hija, estamos en contra de la violencia de género y ningún maldito tiene por qué arruinar tu carrera política! ¿Sale?”.


