El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, confirmó que dos presuntos implicados en el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, fueron hallados sin vida, sumándose al abatimiento de Miguel Ángel Ubaldo Vidales, de 17 años, señalado como el agresor directo contra el funcionario.
De acuerdo con las autoridades estatales, los cuerpos fueron localizados a un costado de la carretera Uruapan–Paracho, en la comunidad de Capácuaro, y ambos habrían participado en el ataque ocurrido el pasado 1 de noviembre. La información —dijo el mandatario— fue “compulsada, revisada y compartida” con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Los nuevos decesos profundizan las dudas sobre el desarrollo de la investigación, luego de que se confirmara que el agresor de 17 años fue abatido pese a haber sido sometido previamente, lo que llevó a la Fiscalía General del Estado a abrir una indagatoria contra los escoltas municipales y elementos de la Guardia Nacional que integraban el esquema de seguridad del alcalde.
El caso ha generado inquietud debido a la posibilidad de que el crimen organizado esté detrás del atentado. Especialistas advierten que la muerte de los presuntos cómplices dificulta la obtención de testimonios clave, además de que podría comprometer la reconstrucción judicial de los hechos.
