La negativa de ingresar al campus de la Udlap, un plantón permanente afuera de la casa de estudios, el bloqueo de vialidades y una campaña tergiversada en redes sociales fue la forma en que el movimiento #UdlapLibre, auspiciados por los directivos de la institución y la familia Jenkins de Landa, respondieron al exhorto de la Jueza de Control del Distrito Centro que pidió reiniciar las actividades educativas y administrativas de la universidad.
En redes sociales, profesores de la institución también hicieron un llamado a la rebeldía, mientras que supuestos padres de familia externaron su preocupación porque “algo” les pueda pasar a sus hijos que se manifiestan en contra de la reapertura.
Alrededor de las 11:00 horas, un grupo de estudiantes y docentes se reunió para anunciar que no realizarían ningún bloqueo de avenidas como ocurrió este martes cuando cerraron la Recta a Cholula y el Periférico Ecológico en sus dos sentidos, pero más tardaron en decir que no lo harían en que un grupo de jóvenes desquiciara el tráfico en la zona.
Luego de una rueda de prensa virtual, en la que Carlos Robledo, abogado de la Fundación Universidad de las Américas Puebla, lanzó críticas sobre el exhorto aprobado por la juez y expresó calificativos como “patronato espurio”, los estudiantes se movilizaron de inmediato para manifestarse sobre la Recta a Cholula y horas más tarde sobre el Periférico Ecológico.
Ante el bloqueo que provocó un intenso congestionamiento vial, los conductores se vieron obligados a tomar la lateral que conduce al acceso principal de la Udlap y así observar la manifestación que montaron allí, donde se apreciaron carteles que acusaban una universidad “secuestrada”, pero a la vez tenía las puertas abiertas a sus espaldas.
A la par, no faltaron los insultos a los automovilistas que, al hacer sonar su claxon, fueron recibidos con patadas hacia sus vehículos, insultos como “chinga tu madre” y piedras que fueron lanzadas por estudiantes, según se aprecia en distintos videos que circulan en redes sociales.
Mientras esto sucedía, otro contingente llevó la protesta al Museo Regional de Cholula, donde se esperaba la visita del Canciller Marcelo Ebrard. Sin embargo, el funcionario federal ya se encontraba al interior para la presentación de un Foro, por lo que la Directora General de Coordinación Política de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Ximena Escobedo Juárez salió a dialogar con ellos.
La funcionaria aclaró al alumnado que la Cancillería no es la instancia en la que deben de mediar un conflicto local, pues le corresponde a las instancias judiciales resolver el tema.
EL FALSO DISCURSO
Minutos antes de que estudiantes y docentes salieran a las calles para provocar bloqueos, el abogado de la Fundación de la Udlap, Carlos Robledo, utilizó una rueda de prensa para pedir a la comunidad universitaria no ingresar al campus, misma a la que sólo fueron invitados a modo algunos medios de comunicación, dejando de lado a otros como esta casa editorial.
Su argumento fue que el Juez 60 de lo Civil de la Ciudad de México es el único que puede restituir la institución a la Fundación Udlap y que esperan que sea ahí donde se emita un resolutivo a favor de la rectora Cecilia Anaya Berrios para poder retomar las actividades.
“Esperamos que el Juez 60 nos haga entrega junto con el juez de Cholula y que como marca la ley, con un funcionario judicial que levante su acta y de fe de lo que quedó allá adentro y entonces retomaremos el campus a quien el juez ordenó que se entregara”, dijo.
Bajo la justificación de que no han sido notificados formalmente, el abogado puso en duda la existencia del exhorto emitido por el Tribunal Superior de Justicia que dictó recuperar las clases presenciales, aun cuando el mismo órgano lanzó un comunicado este 1 de febrero en el que informó que resolvieron retomar todas las actividades a la brevedad y a que el mismo apoderado legal del nuevo patronato de la Fundación Mary Street Jenkins acudió a las instalaciones a entregar la misiva.
A pesar de que Armando Ríos Piter lanzó un video donde explicó que los alumnos pueden tomar clases de forma presencial dentro del campus y que quedó totalmente claro que ya quedó abierta, el abogado de la Udlap se montó en un discurso de que, en caso de ingresar, alumnos y profesores podrían “violentar algo que no es necesario violentar”.
