El canciller Marcelo Ebrard Casaubón se lanzó directo contra gobernadores de Morena. “Están contraponiéndose algunos, los menos, porque en la mayor parte de los estados no es así. Se están contraponiendo a lo que marca el propio partido y el propio presidente de la República, tú no puede ser coordinador o coordinadora de una campaña, si tú quieres coordinar una campaña, pues pídete una licencia, está bien, pero hay 15”, aseveró. El enojo del secretario de Relaciones Exteriores sirve como un buen ejemplo para advertir todo lo que no pasa en la entidad poblana, en donde el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina optó por la más compleja y difícil estrategia frente a la secesión presidencial y local, pero que es la mejor ante la nueva realidad política en el país: garantizar piso parejo a todos los aspirantes. El propio Ebrard reconoció la apertura del mandatario estatal en su visita a la entidad el pasado 15 de abril. Por Puebla han desfilado en varias ocasiones Claudia Sheinbaum Pardo, Adán Augusto López Hernández y Ricardo Monreal Ávila. Los grupos locales alineados con los aspirantes presidenciales también han tenido juego libre y hay un efecto cascada para los tiradores a Casa Aguayo. Sergio Salomón imprimió su propio sello y su estilo personal de gobernador, con eso se ubicó como el líder político en la entidad, dueño del tablero y fiel de la balanza. Todos saben las reglas, nadie puede decirse sorprendido y todos están obligados a la prudencia, el respeto hacia los adversarios y a jugar dentro de los límites permitido de la buena política. Es la era salomónica, cuya esencia ha gustado mucho en el Palacio Nacional.
SE ECHAN A LA BOLSA AL MAGISTERIO
Como en los viejos tiempos, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación volvió a ser cobijado por el poder presidencial. El anunció de un incremento salarial para el magisterio a fin de que los maestros obtengan salario promedio de 16 mil pesos debe interpretarse como la culminación de un largo y tortuoso camino que tuvo que atravesar la dirigencia sindical. Con Enrique Peña Nieto, la organización fue descabezada, su dirigente Elba Esther Gordillo Morales fue recluida en prisión, mientras que la SEP federal puso la bota en el cuello a los huérfanos gordillistas. Con la llegada de la 4T, el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE veía con horror que su odiado enemigo, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, tomaba una fuerza inimaginable. Con suma paciencia esperaron a que los líderes de la coordinadora echaran todo a perder debido a que son una organización sectaria, radical y con un modus operandi de delincuencia organizada. Fue así, que el sindicalismo oficial ofreció aquello que su contraparte no pudo: estabilidad, gobernabilidad y movilización. El sindicato magisterial meterá la mano en la elección del próximo año, muy lejos del partido Nueva Alianza. El SNTE se ha emancipado y va por la recuperación de sus fueros.
