La relación entre Luis Videgaray Caso y el exgobernador Rafael Moreno Valle, habría sido el motivo para confiar en los servicios que ofreció la empresa Sistemas LAC, contratada para gestionar indebidamente la devolución de recursos del ISR ante el SAT.
Videgaray Caso se volvió un personaje clave en la red de relaciones que el gobernador Moreno Valle construyó con importantes funcionarios hacendarios y financieros del gobierno de Enrique Peña Nieto.
A la sazón del secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de la cual dependía el Servicio de Administración Tributaria, el morenovallismo aprovechó la cercanía entre ambos políticos para tramar la devolución millonaria, que terminó generando un hoyo financiero para la actual administración.
Uno de los primeros acercamientos que tuvo Rafael Moreno Valle con Luis Videgaray fue en noviembre de 2012, previo a la toma de protesta de Enrique Peña Nieto como presidente de México.
El entonces coordinador del equipo de transición del presidente electo sostuvo una reunión de trabajo con Moreno Valle Rosas, en la que también estuvieron presentes los secretarios de Infraestructura, José Antonio Gali Fayad; de Finanzas, Roberto Moya Clemente, y el general de Gobierno, Fernando Manzanilla Prieto.
Fue en ese mismo mes y con apenas 13 como gobernador de Puebla, cuando la Secretaría de Finanzas contrató a la empresa Sistemas LAC SA de CV, a través de Marina Castro Moreno, entonces directora general de Administración, para gestionar la devolución de los recursos ante el SAT correspondientes a los ejercicios fiscales 2011 y 2012.
Las primeras acciones de Sistemas LAC fueron análisis de la situación fiscal del gobierno del estado de Puebla en materia de retenciones del Impuesto Sobre la Renta a los servidores públicos, con información proporcionada por la SF.
Marina Castro contrató a dicha firma para elaborar y gestionar la consulta ante el SAT “en la que se otorgue al gobierno del estado el derecho de compensar los saldos a favor que pudiera llegar a tener, derivado de la revisión del citado decreto”, según menciona el inciso b) de la Segunda Cláusula del documento fechado el 6 de marzo de 2012.
Enrique Peña Nieto tomó protesta el 1 de diciembre de 2018 y Luis Videgaray se convirtió en el secretario de Hacienda y Crédito Público, en tanto que Aristóteles Núñez Sánchez tomó las riendas como administrador general del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Uno de los primeros estados que visitó Enrique Peña Nieto fue precisamente Puebla, y lo hizo de la mano del secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray, así como de Rosario Robles, secretaria de Desarrollo Social, y el entonces secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, con quien Moreno Valle mantenía buen trato.
Cumplidos los 100 de días de la administración peñista, Moreno Valle organizó en Puebla el Foro México Incluyente. “Aprovecho la ocasión para reiterarles nuestro compromiso de colaboración y nuestra disposición absoluta de trabajar bajo el liderazgo del presidente de la República, en beneficio de Puebla y de México”, dijo en su discurso del 23 de abril de 2013, el hoy finado exmandatario.
En junio de ese mismo año, Aristóteles Núñez elegiría a Puebla para presentar los resultados del Programa Participa con Civismo (PAR), en los que la entidad se ubicó como el segundo estado con más operativos, al visitar 104.9 por ciento de los domicilios fiscales y establecimientos programados al inicio y logró la inscripción de 24 mil 850 contribuyentes al RFC y la actualización de los datos de 99.1 por ciento de los ya inscritos en los 13 municipios visitados.
“Los intereses del gobernador no son distintos a los del presidente Enrique Peña Nieto: servir al ciudadano y ofrecerle mejores condiciones de vida. Algo de lo que un servidor público en Puebla puede sentirse orgulloso, es que el Estado se conduce con transparencia. Por donde se camine hay obra, ahí están los impuestos. Pero, además, han escalado en muy poco tiempo en el índice de transparencia”, fueron las palabras del jefe del SAT con las que elogió al panista.
Nunca antes en la historia de Puebla se había visto tanto la presencia del gabinete federal, mucho menos cuando se trata de gobiernos que emanan de diferentes partidos políticos.
Encumbrada con el gobierno peñanietista, la administración de Rafael Moreno Valle decide volver a contratar en 2015 a Sistemas LAC para gestionar la devolución de recursos ante el SAT.
Con Aristóteles Núñez al frente del SAT, se firma un contrato modificatorio en octubre de 2015 y es allí cuando se reconoce expresamente el convenio entre Puebla y el gobierno federal para acceder a la devolución del ISR fue firmado en febrero de 2011, tres años después de la fecha límite establecida en el Decreto de 2008, lo que deja sin efecto cualquier posibilidad de acceder a los estímulos.
No obstante, y pese a esta irregularidad, la autoridad fiscal federal acuerda la entrega de los 700 millones de pesos que son devueltos al gobierno del estado del estado en 2015 y otra parte en 2016.
Posterior a la entrega de los recursos, ese mismo año, el 4 de febrero de 2016, se tiene registro de una reunión que sostuvo el gobernador Rafael Moreno Valle el jefe del SAT Aristóteles Núñez.
En el encuentro el ejecutivo estatal estuvo acompañado por quien fuera el jefe de su oficina, Roberto Moya Clemente, y por los secretarios de Finanzas y Administración, Guillermo Bernal Miranda y de Desarrollo Social, Luis Banck Serrato.
No fue sino hasta 2018, siendo entonces electo Andrés Manuel López Obrador, que el SAT descubrió el engaño en el que estarían involucrados los gobiernos peñistas y morenovallistas, que ocasionó un hoyo financiero de 2 mil 600 millones de pesos a la actual administración poblana.
