13.7 C
Puebla
lunes, noviembre 25, 2024

El obradorismo se echa a las calles para respaldar la Cuarta Transformación

Más leídas

Tras la primera marcha grande de la oposición en cuatro años de gobierno de Morena, el obradorismo no se quedó con los brazos cruzados y se lanzó a las calles de la capital del país como no lo hacía en mucho tiempo.

Con cánticos de “no somos acarreados” y “el INE sí se toca”, más de un millón de simpatizantes del Presidente Andrés Manuel López Obrador y de la Cuarta Transformación se lanzaron a las calles de la Ciudad de México para apoyar el proyecto de gobierno y contrarrestar el mensaje de la oposición.

El impacto no fue mínimo, en la ciudad no entraba un alma más desde una noche antes. Las salidas de autobuses agotadas, las habitaciones en hoteles y moteles ocupadas a tope y las calles en su límite de capacidad, todo para caminar al lado del Presidente de México.

“Yo soy acarreado, pero por la honestidad del Presidente”, coreaban algunos asistentes en forma irónica, jugando con las críticas de la oposición a la marcha que desde días atrás acusaban un acarreo masivo de personas para desacreditar la marcha.

Otros, en una forma no tan de broma, defendían su presencia en las calles de la Ciudad de México, asegurando que hicieron su viaje largo para respaldar al Presidente por voluntad propia y sin que los convencieran.

“Venimos con mucho orgullo por mi Presidente: honesto, leal a su pueblo y estamos felices de estar aquí apoyándolo siempre. Nosotros lo seguimos desde hace mucho tiempo, estamos de acuerdo con él y es el único Presidente que ha volteado a ver verdaderamente al pueblo y que ha buscado un cambio verdadero”, decía Lucía, una poblana de Tepeaca que hizo el viaje desde la madrugada para estar con el Presidente en su cuarto informe de actividades.

Lucía, quien pidió no ser fotografiada, apoyaba con gritos y pancartas de “La Cuarta Transformación sigue”, gritos no muy alaridos, pero seguros.

Ella era más reservada a diferencia de los cientos que buscaban de mil formas diferentes llamar la atención con muñecos, piñatas, trajes típicos de regiones como Oaxaca, máscaras del Presidente o los típicos chalecos de Morena y del Partido del Trabajo (PT).

Aunque no lo expresa de forma tan efusiva, Lucía se muestra alegre de que múltiples grupos, organizaciones sociales y civiles, diversos sectores del país se sumen al movimiento en apoyo al Presidente de la República.

Se asombra de ver a representantes de sindicatos como los electricistas, del magisterio como el SNTE, organizaciones LGBTTTIQ+, organizaciones de los pueblos originarios, y adultos mayores en su gran cantidad respaldando al Presidente.

Otras que provienen de más lejos, como Susana, de San Luis Potosí, aseguraron que nadie les pagó para acudir apoyar al Presidente, que es un movimiento por la confianza en su gobierno.

“Yo vengo por voluntad propia y porque creo en este gobierno, a mí nadie me pagó, aquí estamos apoyando al presidente Andrés Manuel López Obrador”, dijo la manifestante al esperar el inicio de la marcha junto a su contingente a la altura del Auditorio Nacional.

Otros como Arturo, un joven universitario de la UNAM que formó parte de los contingentes que ya esperaban al Presidente por el Ángel de la Independencia, refrendó su apoyo al Presidente más por una cuestión de cambio de gobierno.

“Creo en este gobierno y creo que es momento de hacer un cambio sin confrontarnos, este país alcanza para todos”, dijo el joven estudiante quien se encontraba lanzando cánticos a favor de la reforma electoral propuesta por López Obrador y que consideró necesaria para generar un mejor modelo electoral del país y mejor funcionamiento del Instituto Nacional Electoral (INE).

Otros, más radicales en su mensaje, exigían a Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, salir a las calles, a rebajarse el sueldo, a no temerle a los mexicanos ni a la reforma electoral.

Pero muchos más, como José Luis –un señor de edad avanzada proveniente de Tlaxcala– sin enfrascarse en un solo personaje, se motivaba a gritar una y otra vez con más fuerza que la anterior “es un honor estar con Obrador” por los apoyos sociales que ha garantizado para este sector de la población.

Para él, ningún otro Presidente de la historia reciente del país se había preocupado por los adultos mayores y por los jóvenes en edad de estudiar, por garantizadles apoyos para seguir adelante o tener una vida digna.

Pero sobre todo, decidió hacer el viaje por estar a favor del combate frontal a la corrupción en el país, de acabar con los privilegios para las clases sociales altas y de eliminar los privilegios para los empresarios que no pagaban impuestos, dinero que sirve para los programas sociales que los han apoyado en estos cuatro años, asegura.

“En estos cuatro años se han hecho grandes logros, todavía falta mucho por hacer, sin lugar a dudas, pero se está haciendo algo importante, se está transformando, la sociedad se está concientizando de que es importante terminar con la corrupción”, sostuvo.

Más artículos

Últimas noticias