La aprehensión de Hugo Marín Torres no ocurrió por daño patrimonial, como se esperaba, fue por el delito de narcomenudeo.

A las 8:40 horas del 17 de noviembre, en un inmueble de dos pisos ubicado en la colonia Centro del municipio de Teziutlán, la justicia cayó para José Hugo Marín Torres, hermano del exgobernador de Puebla Mario Marín Torres, quien se encuentra preso en Quintana Roo,
acusado por el delito de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho.

La caída de Hugo Marín Torres no ocurrió por daño patrimonial, lo que anteriormente le había valido su inhabilitación dentro del ejercicio público tras presuntos actos de corrupción
como director del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Teziutlán (Sosa patz). Su detención ocurrió, por el contrario, por incurrir en el delito de narcomenudeo.

La ficha de su captura, de acuerdo con el Registro Nacional de Detenciones, da cuenta que el hermano del exgobernador poblano fue detenido sobre la calle Juan Cordero, entre las calles Vicente Guerrero y Clavijero, dentro de Teziutlán, mismo municipio en el que fungió como director del Sosapatz por más de dos años.

Lo que encontraron los agentes ministeriales de investigación de la Fiscalía de Puebla fueron pruebas contundentes de su participación en hechos delictivos: armas, vehículos de lujo y estupefacientes, todo dentro de un inmueble de dos pisos con fachada color café con blanco y con un zaguán metálico color café.

La Fiscalía realizó cateos en conjunto con la Guardia Nacional, lo que derivó también en la captura de otras siete personas, incluido su propio hijo, quien lleva el mismo nombre, aunque no se han proporcionado al menos hasta el cierre de esta edición más información sobre el perfil de los aprehendidos.

Al respecto, Carlos Peredo Grau, presidente municipal de Teziutlán, aseguró que la policía municipal no tuvo ninguna injerencia en la detención del exburócrata y tampoco tenían
información respecto a la orden de aprehensión girada en su contra, a pesar de que trabajo
en su administración cuando fue edil del año 2011 al 2014.

A la par, aseveró que su relación con el exdirector del Sosapatz únicamente se sostuvo
cuando fue alcalde hace más de 10 años, además de que en el periodo que colaboró con él, habría tenido una conducta lejana de cualquier sospecha por estar vinculado con la delincuencia.

“A nosotros no nos avisan, son operativos muy cerrados, información muy de ellos, nosotros como gobierno, no participamos de esas actividades, son investigaciones que ellos hacen desde semanas antes (…) “Hugo Marín, conmigo siempre se comportó con respeto, las circunstancias de su cambio son de su persona, cuando él estuvo conmigo, yo nunca le observe algo así”, indicó.

Aunque Carlos Peredo Grau desmiente tener cercanía con el exdirector del Sosapatz, de
acuerdo con el columnista Alberto Rojas, en realidad fue uno de sus principales operadores, a tal grado que dentro de la planilla de Compromiso por Puebla incluyó a una de sus hijas, Valeria Marín. A José Hugo Marín también lo persigue un oscuro pasado de corrupción. Un ejemplo fue que en los ejercicios fiscales 2011 y 2012, respectivamente, a su paso como responsable del Sosapatz, fue acusado por supuesto daño patrimonial.

El primero ocurrió del 19 de febrero al 31 de diciembre de 2011 por un monto de 8 millones 522 mil 781 pesos, lo que le valió que el Congreso del estado avalara su inhabilitación por 12 años.

En tanto, el segundo daño patrimonial detectado abarcó el periodo del 1 al 31 de diciembre
de 2012 por un monto de 530 mil 225 pesos, lo que implicó una sanción de inhabilitación
Carlos Peredo Grau, presidente municipal de Teziutlán, aseguró que la policía municipal no tuvo ninguna injerencia en la detención del exburócrata. por cinco años más para no ejercer ningún cargo público.

Ambas inhabilitaciones fueron publicadas el 4 y 8 de octubre de 2018 en el Periódico Oficial del Estado y el monto total del daño patrimonial ascendió a los 9 millones de pesos.

La organización civil l Frente Cívico Serrano Teziuyotepetzintlán también ha denunciado que el hermano de Mario Marín invirtió 32 millones de pesos en pozos de dudosa calidad para el Organismo Operador de Agua Potable, toda vez que no se cobraba el monto correcto por el suministro en el municipio y todo ocurrió bajo la sombra del presidente municipal
Carlos Peredo.

A lo largo del tiempo que estuvo al frente de la Dirección del agua en Teziutlán, Hugo Marín fue presa de señalamientos por haber utilizado el cargo como “trampolín político” y para beneficio económico personal, además de que cometió varios yerros como el despido de personal de manera injustificada y un desorden administrativo.