En el tarot, la primera carta de los arcanos mayores es el loco. Se le representa con el número cero y tiene como característica a un ser humano que carga una pequeña maleta como un viajero, mira al cielo sin notar que un paso más y puede caer en un acantilado. Está el sol pleno alumbrando el día. El loco lleva una rosa en una mano y un perro le ladra advirtiendo el peligro; el hombre lo ignora. El loco es ese hombre arriesgado que no se amedrenta por nada, que se puede caer, que vive en una ilusión, en una esperanza, en un sueño. El loco es el aguerrido, leal, aventado, confiado, enamorado, esperanzado. Y es esa actitud que más adelante cuando la ve uno hacia atrás uno mismo se espanta y dice: “cómo es que no me caí. Cómo es que no me pasó nada. Sin duda, estaba loco”. Quiero aclarar que no sé ni me interesa leer el tarot y menos con fines esotéricos o mágicos, esos temas me generan rechazo porque siento que es estafar a la gente buena que busca respuestas a su vida, pero más allá de ello, las cartas podrían representar situaciones demasiado humanas. Cuando arrancamos la Revista 360 Grados Instrucciones para vivir en Puebla estábamos como en la carta “El loco”. No sabíamos que iba a pasar, desconocíamos si es que llegaríamos al año 15 y caminábamos en una montaña sin observar que un paso en falso podría hacernos caer en el acantilado. Era un mes de julio cuando se planeó y un mes de noviembre del 2007 cuando apareció el primer número, el del loco. Y de ahí comenzó este periplo. Y hemos pasado muchas grandes experiencias, demasiados aprendizajes, amores, desamores, alegrías, tristezas, enojos. Aciertos y desaciertos. A veces algunos de nuestros críticos nos han hecho reaccionar porque más allá del señalamiento nos ayudan a ver qué modificar. Nuestro grupo de fans nos dicen por qué camino seguir, es una suma de un todo. Pero aquí estamos. Quizá ya no seamos ese personaje aventurado que no mira que un paso en falso y puede caer en el acantilado. Los años nos hacen medir con más claridad las consecuencias de nuestros actos. Nos hacen no más inteligentes, más bien mañosos. A veces, cuando uno recuerda esa actitud cándida de iniciar un proyecto, esa visión de un loco, grita a los cuatro vientos por recuperarla porque gracias a esa forma de actuar y de pensar se llevó a cabo un proyecto. Eso fue en un inicio y eso fue Revista 360 Grados. El sueño de un loco. El querer quitarle lo rosa a las publicaciones locales. El llevar temas que en ese 2007 nadie se atrevía a tocar. Decirles no a los piolines ni a los pensamientos positivos de filosofía barata y obvia. Era un riesgo porque en ese 2007, lo que abundaban eran las revistas de sociales que no tenían nada más que fotos. Nosotros nos apostamos por un público inteligente, crítico, analista que sí existe y es muy basto. Por ese público es porque vale la pena regresar a la carta del arcano número “0” y reiniciar el periplo del héroe a sabiendas que nos podremos caer, como ha sucedido, que nos podemos equivocar, como también ha ocurrido, pero que nos ha hecho divertirnos como niños que descubren nuevas experiencias en su vida. Esa capacidad de sorpresa que nunca se acabe. Que esa ingenuidad no se nos quite y nos convirtamos en esos medios de comunicación que justifican cualquier clase de abuso y estupidez humana. Son 15 años con ustedes, que son parte de esta historia. Lo logramos. Ya llegan los chambelanes y los padrinos a bailar con nosotros. Ya está la botella de champagne para ser destapada. Lo logramos. Y con perdón de don Carlos Gardel, porque 15 años no es nada.
jueves, noviembre 21, 2024
