17.4 C
Puebla
jueves, noviembre 21, 2024

Tradición Huasteca

Más leídas

La Huasteca ha tenido al paso del tiempo una serie de transformaciones y muchas de ellas han fortalecido los lazos que unen a los propios huastecos y habitantes de estados circunvecinos. 

Año con año se efectúa la celebración en cada uno de los estados que pertenecen a este núcleo poblacional. 

Un estribillo lo describe bien: 

“…Para hablar de la Huasteca, hay que haber nacido allá saborear la carne seca, con traguitos de mezcal, fumar cigarrito de hoja, prenderlo con pedernal. Y aquel que mejor lo moja, más largo lo fumara”. 

En Xicotepec de Juárez, Puebla, la primera gran celebración de este encuentro anual se llevó a cabo en el año 2001. Trajo consigo encuentros de jaraneros, concursos de bailadores de huapango, de decimeros, gastronomía y muchísimas cosas más que distinguen esta región catalogada como La Franja huasteca poblana, que colinda a su vez con el estado de Veracruz. 

Hay que decir que conseguir el reconocimiento a la Sierra Norte del estado de Puebla como integrante de La Huasteca no fue una tarea fácil, y, en su momento, lo gestionaron ante las distintas dependencias estatales y federales. 

La Huasteca es una región multicultural que comprende la parte sur del estado de Tamaulipas, el norte de Veracruz, el oriente de San Luis Potosí, el norte del estado de Hidalgo, una porción norte de Querétaro y una porción pequeña del norte de Puebla. Justo esta pequeña porción –hablando de Puebla– costó mucho trabajo para que fuera reconocida como tal. Sin embargo, con el paso del tiempo, es una zona que más se ha distinguido por su gastronomía, sus bailes y todo lo que encierra este gran festejo anual. 

En esta región determinada no por lo político, sino por lo cultural –que tuvo como antecedente el antiguo reino de Huastecapan, donde se forjó la cultura huaxteca en la época prehispánica– conviven al menos seis grupos indígenas que han dado identidad multicultural a esa parte del territorio nacional. Esto ultimo es lo que describen los anales de la historia. También hay que apuntar que de las distintas lenguas que se hablan hay algunas que están en riesgo de extinción y se hace necesaria hoy más que nunca la intervención de las autoridades para lograr su permanencia. 

…Para hablar de La Huasteca hay que haber nacido allá, saborear la carne seca con traguitos de mezcal. 

Fumar cigarrito de hoja, prenderlo con pedernal, aquel que mejor lo mojas más largo lo fumará. 

Y se siguen los estribillos que hacen concatenar no sólo los aspectos gastronómicos, de baile, etc. Sino en los aspectos culturales. 

Justo en el primer encuentro huasteco nació el Taller Literario de Xicotepec, que ya cumplió 21 años y a través del cual sus integrantes han publicado 4 antologías de cuento y poesía y una plaquette. Es un tema que en su momento lo consignaremos aquí en este espacio. 

Obviamente que el festejo referido transita por una serie de actividades que a lo largo de una semana y de varios espacios fortalecen estas grandes tradiciones. 

Concursos de huapango, platillos huastecos venidos desde los distintos espacios que pertenecen precisamente a La Huasteca, traídos todos ellos por los auténticos representantes huastecos desde los 6 estados que pertenecen a esta región. Bajo el brazo transportan todo lo que su región produce, desde lo gastronómico, transitando por las distintas bebidas que se producen, sus prendas artesanales elaboradas por verdaderos maestros del arte popular, no se diga de los magistrales decimeros que hacen de los bailes de huapango veladas que se prolongan hasta las primeras horas de los días subsecuentes a su celebración. 

Los que acuden poseen un cúmulo de conocimientos que comparten en este encuentro y que, a lo largo del año, va mejorando desde los aspectos artesanales, elaboración de prendas que les identifican como tales, etc. 

Han surgido verdaderos grupos de bailadores de huapango, los que concursan de manera grupal y de parejas, obviamente de los que ejecutan los sones y que han dado reconocimiento per se. 

Hay municipios –como Pahuatlan– en donde el baile del huapango lo ejecutan desde niños, jóvenes y adultos mayores, teniendo una lunada como escenario. El parque central se convierte en un centro de encuentro de familias. Mitigan la sed que produce el baile de la noche unas cervezas bien frías. Se agrupan por familias o conocidos y los cartones de cerveza se ven por doquier. Todo transita con algarabía hasta que el amanecer les sorprende y el sueño, el hambre y las ganas de descansar esperarán para mejor momento el próximo año. 

Y estos festejos se repiten en cada edición de la celebración de La Huasteca. Algunos estados tienen una mayor presencia de lo que encierran sus haberes y saberes huastecos, otros van paulatinamente avanzando, fortaleciendo estas fiestas y tradiciones; lo más importante es que están legando a las nuevas generaciones esta serie de conocimientos ancestrales que identifican a los pueblos.
 

Haré un alto obligado. Acaba –el pasado 6 de mayo– de cumplir un año de fallecido una emblemática figura del huapango en Xicotepec, Pablo Barrios, a quien le colocaron aún en vida una escultura que se encuentra a un costado de la plazuela 5 de mayo. Fue reconocida su labor denodada en su paso por su labor creativa y de baile; fue premiado en varios estados de la República donde se realizaban los bailes de huapango. 

Tristemente pasó desapercibida la fecha de su fallecimiento. 

Desde aquí rendimos tributo a una persona que llevó el nombre de Xicotepec muy en alto. 

A un año de su partida… descanse en paz. 

Notas relacionadas

Últimas noticias

spot_img