12.3 C
Puebla
viernes, noviembre 22, 2024

Mitos y fantasías de los gobernadores terrenales

Más leídas

Los dos se apellidan Fayad. 

De hecho, se llaman “primo” o “primazo”, o “primate”. 

Y sí lo son. 

Fueron gobernadores al mismo tiempo —y por unos meses— de Puebla e Hidalgo. 

(Omar Fayad lo sigue siendo). 

Uno es cantante de karaoke. 

Otro, ya lo vimos, es DJ e imitador de Freddie Mercury. 

Uno ya sólo canta en el baño. 

El otro, el de Hidalgo, debutó como primer cómico de México —disputándole el honor a Eugenio Derbez, exesposo de su mujer— la noche del viernes. 

Los dos fueron, hay que decirlo, gobernadores terrenales. 

(Así bautizaron dos comentaristas poblanos a Tony Gali Fayad en el contexto de una delirante noche de karaoke en Casa Puebla). 

Las dudas matan: 

¿Quién fue primero: Omar Fayad o Freddie Mercury? 

¿Quién imita a quién? 

La transformación se hizo evidente durante la inauguración del Aeropuerto Felipe Ángeles. 

De pronto, salido de algún comic extraño, Freddie Mercury apareció detrás del presidente López Obrador. 

El bigotazo, la melena, la actitud, todo llevaba encima. 

Sólo faltaba el gritito que terminó soltando en un antro de Pachuca la noche de este viernes, cuando los sorprendidos asistentes lo descubrieron junto al DJ haciendo las veces de éste, metido en una camiseta blanca. 

Lo mejor vino cuando soltó el grito de Freddie Mercury y sobrevino la canción de Queen: We are the champions. 

Unos aplaudieron. 

Otros aullaron. 

Los más sensatos sólo se preguntaron (atónitos, inéditos):  

“¿Y este pendejazo es nuestro gobernador?”. 

Cuánta razón tuvo Kissinger cuando, en alusión a Nixon, dijo aquello de “sí a este pobre hombre lo hubieran abrazado a los seis años…”. 

 

Patadas en el trasero (Cortesía del Empleado del Mes). El pasado 5 de abril fueron citados al salón de usos múltiples del Parque Centenario Laguna de Chapulco casi todos los servidores públicos del ayuntamiento de Puebla —de jefes de Departamento a subsecretarios—, para el muy noble y leal propósito de hacer propaganda preelectoral en favor del Empleado del Mes, quien también responde al nombre de Eduardo Rivera y Pérez. 

¿Qué instrucciones les dieron a los colaboradores a sueldo? 

Que es obligatorio compartir en sus redes sociales personales los mensajes del “señor presidente municipal”. 

—¿El fin? 

—“Lograr su posicionamiento”. 

—¿Cuál posicionamiento?, se preguntará el hipócrita lector. 

Y es que si en algo se ha posicionado nuestro personaje es en temas como la ineptitud, la pena ajena, el fracaso, el engaño, el doble discurso y, otra vez, la ineptitud. 

Haciendo un análisis rápido de los retuits y “me gusta” —de la cuenta de Twitter del Empleado del Mes—, algo salta a la vista: a partir de ese día creció considerablemente su “influencia”. 

Qué triste que sea a costa de los búfalos a sueldo y de la cargada solicitada. 

Dije “solicitada”. 

Debí decir: ordenada. 

(Ni Claudia Rivera y Vivanco incurrió en tal despropósito). 

Desde que arrancó esta administración municipal hay que decir que se la pasan en capacitaciones y evaluaciones. 

¿Y quiénes creen que las imparten a cambio de excelente paga? 

Puras universidades privadas. 

(En particular la muy confesional UPAEP, cuyos dueños son los Santos Varones que tienen como empleado a Rivera y Pérez). 

Volvamos a la reunión de Chapulco. 

Ahí les dijeron a los nobles burócratas de medio pelo que en esta administración se acabaron los horarios. 

Hay hora de entrada, sí, pero no de salida. 

(En otras palabras: adiós a las horas extras). 

Y si no les gusta o no les conviene, “pasen con Arrubarrena (Bernardo)”, fue la amenaza. 

(Pasar con Arrubarrena no es nada bueno, pues, traduciendo el énfasis dado a la advertencia, significa llanamente: “Te la tragas o te vas”. 

Vea el hipócrita lector de nuevo lo que —palabras más, palabras menos— les argumentaron a los resignados burócratas: que su contratación se dio a pesar de que había miles que deseaban el empleo, por lo que deben dar todo lo que se les solicite, toda vez que muchos querían esa oportunidad. 

Por si fuera poco, les echaron en cara que firmaron al mismo tiempo dos documentos: el de su contrato y el de su renuncia sin fecha. 

Ufff. 

Rudeza innecesaria. 

Y humillación de facto. 

Y una duda que mata: 

Al edificio Majestic, Reforma 519 —remodelado para rentárselo a Rivera y Pérez—, pretenden reubicar a tres áreas del Ayuntamiento de Puebla. 

En otra palabra, éste es otro pago de favores, muy similar al que se hizo con la casa ubicada en la 21 Poniente 3305-A, qué pasó de ser la casa de campaña de Marcos Castro, actual secretario general del PAN, a las oficinas de la Secretaría de Servicios Públicos del ayuntamiento de Puebla. 

¿De quién será la citada casa, a quién le harán el favor con dinero público? 

Notas relacionadas

Últimas noticias

spot_img