23.6 C
Puebla
jueves, abril 25, 2024

Texas vive la tragedia de migrantes más importante de la historia reciente

Más leídas

¿Qué es lo que lleva a que en un tráiler aparezcan los cuerpos de 50 muertos por asfixia y otras 12 estén en condición de moribundas? En el macabro hallazgo cada minuto aparecen más datos escalofriantes. Por ejemplo, el aire acondicionado del vehículo sí servía pero no fue activado, lo que resultó mortal ante una ola de calor que azotó a San Antonio, Texas.

Los gritos de las personas pidiendo auxilio fueron escuchadas por los vecinos del camino vecinal donde se encontraba el camión. Eso derivó a que llamaran a las autoridades para intervenir.

No se sabe todavía qué hacía un cuerpo tirado a las puertas de salida del vehículo. Lo que sí es un hecho para los habitantes de San Antonio es que, de confirmarse la magnitud del caso de contrabando de personas, sería la tragedia humanitaria migrante más grande en la historia reciente de Estados Unidos.

El incidente más reciente que ha reportado el país norteamericano, y que también se suscitó en el estado texano, fue en 2017, cuando al sur de la misma ciudad –San Antonio– un camión fue encontrado con 10 inmigrantes muertos en su interior; y el caso de mayor magnitud se había suscitado en 2003, cuando otro hallazgo horrorizó a la población, en el que se contabilizaron 19 cuerpos sin vida de migrantes en un camión abandonado al sureste de San Antonio, en medio de un calor intenso.

Aunque la historia ha sido la misma desde hace muchos años en el estado de la estrella solitaria, la escena que se registró en la ciudad el 27 de junio pasado ha sido la más extraña y horrorosa de los últimos años.

A las 17:51 horas, un guardia de seguridad de un depósito cercano al lugar del hallazgo reportó a través del número 911 un ruido extraño que perturbó el ambiente, el grito de auxilio de una persona que se arrastraba por el suelo en las proximidades del tráiler.

El tráiler se localizaba al suroeste de la ciudad de San Antonio, en las calles de Cassin y Quintana, cerca de la base de la Fuerza Aérea de Lackland, a 16 kilómetros del centro de la ciudad, y aproximadamente a 250 kilómetros de la frontera entre Estados Unidos y México.

Las autoridades ignoran la hora en la que el tráiler llegó a ese punto, desde qué momento fue abandonado por los conductores, solo recibieron el llamado de alerta del guardia, de un remolque abandonado con las puertas entreabiertas por donde el sujeto que pidió auxilio pudo salir para buscar ayuda.

Al sitio llegaron 20 unidades de la policía y equipos de emergencia de San Antonio, 65 bomberos y una decena de ambulancias para presenciar la escena: 51 cuerpos sin vida de migrantes centroamericanos y 16 más con signos vitales, pero con notable debilidad para moverse.

Los reportes señalaron que los cuerpos de las personas sin vida –22 de ellas originarias de México, 7 de Guatemala, 2 de Honduras y 19 todavía sin información– reportaron señales de deshidratación y asfixia por las temperaturas, pues tan solo al contacto irradiaban calor extremo.

Aunque los reportes del clima reflejaban que en las últimas horas se había registrado nubosidad en la ciudad, las temperaturas en la zona señalaban que las temperaturas alcanzaron los 39.4 grados centígrados, algo usual durante la temporada de verano en Estados Unidos, donde incluso se presentan olas de calor que causan estragos en los habitantes.

Durante la revisión del tráiler, las autoridades no encontraron que los migrantes contaran con acceso a agua durante su viaje, ni que tuvieran calefacción o aire acondicionado del vehículo, mismo que no mostró señales de estar dañado para su funcionamiento, por lo que aún no se entiende la razón por la que se dejó en ese estado a las personas.

Pero otra de las cosas que llamó la atención de los agentes fueron las placas del vehículo, sobrepuestas sobre las originales para –según las primeras indagatorias de las autoridades del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos– ingresar al país sin ser inspeccionados, lo que ha hecho apuntar las investigaciones contra traficantes de personas, y a su vez han apuntado a los carteles del crimen organizado, que han diversificado sus áreas de influencia en el país.

Con estas primeras evidencias, las autoridades estadounidenses han procedido con la detención de tres presuntos responsables por el ingreso ilegal del vehículo y por una probable conspiración para el contrabando de personas.

Algunos de los testigos que declararon para medios como New York Times, Los Angeles Times, BBC News y The Washington Post han señalado que el tráiler estaba estacionado en las cercanías de un paso ferroviario muy conocido por los pobladores y los migrantes que intentan llegar a Estados Unidos.

Texas ha sido por años el paso de los migrantes mexicanos y centroamericanos para llegar al sueño americano, ya sea por camiones transportados por “polleros”, por instrucciones de los cárteles de droga que controlan el paso, por la vía de los trenes, donde en cientos de ocasiones se han visto a los migrantes ir montados en los techos de los vagones.

Y es ese camino ferroviario que conecta a la entidad poblana –y que muchas veces ha conectado a los migrantes con sus “transportistas” o con otro tren que los ingresará al país fronterizo– con el caso de contrabando humano más escalofriante de los últimos años, donde por lo menos dos de los 22 mexicanos fallecidos serían de procedencia poblana.

El representante de la Fundación Pies Secos, que le da acompañamiento a los migrantes en su trayecto y estadía en la Unión Americana, reportó que dos poblanos originarios del municipio de Izúcar de Matamoros estarían entre los muertos de este acontecimiento, aunque las autoridades de dicha demarcación habrían negado dicho dato.

El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, puso a su disposición el apoyo de las tareas de su gobierno para coadyuvar con la identificación de los cuerpos y el apoyo a las familias para la repatriación de los fallecidos con sus familias.

 

CIFRAS

  • 27 de los 50 migrantes fallecidos en la tragedia de Texas eran mexicanos.
  • 3 de 13 supervivientes son ciudadanos de México y reciben atención médica, de acuerdo al último saldo preliminar de las autoridades

Más artículos

Últimas noticias