En 2023, Puebla ocupó la posición 15 a nivel nacional entre los estados con menor incidencia de muertes violentas de mujeres, registrando una tasa de 2.96 por cada 100 mil mujeres. Sin embargo, las llamadas de emergencia relacionadas con violencia han mostrado un incremento constante desde 2016 en todo el país. Mientras que en ese año el promedio mensual de llamadas superaba las 7 mil, para 2023 esta cifra se disparó a 28 mil a nivel nacional.
El informe Seguimiento y evaluación de la justicia penal en México, elaborado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), por sus siglas en inglés, la Fundación Friedrich Naumann y México Evalúa, señala que mientras que Puebla presenta cifras moderadas, estados como Colima enfrentan una crisis con un incremento superior al 800 por ciento en su tasa de muertes violentas de mujeres respecto a 2022.
Entidades como Baja California, Chihuahua, Guanajuato y Morelos también registraron tasas elevadas, oscilando entre 12 y 15 muertes por cada 100 mil mujeres. Por otro lado, estados como Baja California Sur, Yucatán, Coahuila y Nayarit lograron reducciones significativas superiores al 89 por ciento debido a sus estrategias focalizadas.
Aunque el reporte no presenta cifras detalladas de resolución de delitos contra mujeres en Puebla, en octubre de 2023, el exfiscal Gilberto Higuera Bernal, informó que en el caso de los feminicidios ocurridos entre 2022 y los nueve primeros meses del siguiente año, se habían esclarecido 80 por ciento de las carpetas de investigación por ese ilícito, como parte de los resultados obtenidos tras la declaración de la Alerta de Violencia de Género contras las Mujeres.
Además del feminicidio, el rapto mostró una alta prevalencia de víctimas mujeres con 88.76 por ciento. De igual manera, trata de personas y corrupción de menores presentaron más de 50 por ciento de las víctimas siendo mujeres con 63.60 y 56.74 por ciento, respectivamente.
A nivel nacional destaca que en feminicidios, 57.9 por ciento de los casos se concluyeron con una sentencia condenatoria en juicio oral, el 28.1 por ciento mediante un procedimiento abreviado, un 5 por ciento por suspensión condicional del proceso, 4 por ciento por sentencia absolutoria y otro 4 por ciento por sobreseimiento.
LOS AGRESORES
En cuanto a los procesos penales, la violencia familiar fue el delito por el que más se vinculó a proceso a hombres y mujeres, representando 24.8 por ciento y 30 por ciento de los casos, respectivamente.
En segundo lugar, el robo destacó como otra causa significativa de vinculaciones, que afectó a 24.49 por ciento de los hombres y a 22.5 por ciento de las mujeres procesadas penalmente.
Sin embargo, las estadísticas divergen en el caso de los delitos de lesiones y narcomenudeo. Mientras que las mujeres enfrentaron un mayor número de procesos por lesiones (18.87%), los hombres fueron más frecuentemente procesados por narcomenudeo (11.5%).
A esto se suma que, en Puebla, a los hombres se les impuso mayormente prisión preventiva oficiosa (48%) frente a las mujeres (44.1%), lo que implica que fueron encarcelados de inmediato sin necesidad de comparecer ante un juez debido a la gravedad del delito cometido.
En cambio, en la entidad 55.9 por ciento de las mujeres que cometieron un ilícito se enfrentaron a la prisión preventiva justificada, es decir, un juez determinó la situación de riesgo antes de definir su encarcelamiento, esto, frente a 52 por ciento de hombres que pasaron por este proceso.
A nivel nacional, de las 20 entidades que proporcionaron datos diferenciados por sexo, se observó que a los hombres se les aplicó prisión preventiva en el 43.9 por ciento de los casos, frente al 38 por ciento en mujeres. Sin embargo, la falta de transparencia en 12 estados, incluyendo entidades relevantes como Ciudad de México y Estado de México, dificultó un análisis más completo.