El presidente Andrés Manuel López Obrador dejó el mensaje claro para todos los aspirantes al gobierno de Puebla por Morena, que esperan la señal para ser el abanderado de la coalición “Juntos Hacemos Historia” en el 2024: “no habrá dedazos”
El mandatario federal descartó que haya “tapados” o que tenga algún favorito para la candidatura al gobierno de Puebla por Morena, como sucedía desde los tiempos del presidente Porfirio Díaz, pues dejará la definición dejará la definición sea a través de la encuesta.
A pregunta expresa sobre si tenía algún favorito para la gubernatura poblana durante la conferencia mañanera, López Obrador ironizó sobre sus preferencias hacia los comicios del próximo año al señalar que tiene “6 millones de favoritos” en la entidad.
“Sí tengo como 6 millones de favoritos, esa es la población aproximada en Puebla, todos son mis favoritos, le tengo mucha confianza a la gente, a los poblanos”, expresó durante la conferencia matutina.
López Obrador comentó que el pueblo es sabio y será el que decida quién será su candidato a la gubernatura del estado, ya que en su mandato no habrá imposiciones ni se permitirá que se utilicen recursos públicos para promocionar a actores políticos en busca de candidaturas.
Sobre la promoción de diferentes políticos en la entidad a través de pinta de bardas o con el uso de su nombre, el presidente de México enfatizó que durante su gobierno ya no se permitió el uso de recursos públicos para posicionar a candidatos de cualquier partido a cargos de elección popular, como ocurría en los gobiernos pasados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN).
En ese sentido, el presidente López Obrador exhibió como parte de las múltiples artimañas que organizaba la mafia del poder para perpetrarse en el poder, el PAN llegó a un acuerdo con el exgobernador Mario Marín Torres, para ayudarles en el fraude electoral de 2006 en el que le robaron la Presidencia de la República.
López Obrador resaltó que en Puebla también se cometieron fraudes en complicidad entre gobiernos priistas y panistas, pues antes de la elección de 2006, el PAN era uno de los principales críticos al gobierno de Marín Torres en Puebla.
No obstante, cuando llegó la elección presidencial de 2006, las voces críticas al mandatario poblano cesaron y él los apoyó rellenando urnas con boletas marcadas a favor del candidato panista a la presidencia de México, Felipe Calderón Hinojosa.
López Obrador enfatizó que en la actualidad no se permitirá que se cometan más irregularidades en procesos electorales ya que no habrá imposiciones de candidatos ni de gobernantes porque el pueblo decidirá quién los representa en las elecciones.
