El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, redobló este lunes su ofensiva en la guerra comercial contra China y lanzó nuevas críticas hacia Europa. En declaraciones desde la Casa Blanca, Trump amenazó con imponer aranceles adicionales del 50% a productos chinos, lo que elevaría la carga total al 104%, si Pekín no elimina antes de este díasus medidas de represalia, actualmente fijadas en el 34%.
“CHINA HA ABUSADO DEL COMERCIO DURANTE DÉCADAS. SI NO ELIMINAN SUS ARANCELES, LOS NUESTROS SUBIRÁN AÚN MÁS. CINCUENTA POR CIENTO ADICIONALES, ASÍ DE SIMPLE”, DECLARÓ TRUMP ANTE MEDIOS LOCALES E INTERNACIONALES.
La advertencia representa una de las amenazas más duras desde el inicio de la guerra comercial con la potencia asiática. Por su parte, China reafirmó su postura en favor de una cooperación basada en principios de equidad y beneficio mutuo.
“SI EE.UU. INSISTE EN EL ENFRENTAMIENTO, RESPONDEREMOS DE FORMA PROPORCIONAL”, INDICÓ UN PORTAVOZ DEL MINISTERIO DE COMERCIO CHINO.
Por otro lado, Trump rechazó una propuesta de la Unión Europea que buscaba eliminar los aranceles a productos industriales, considerándola insuficiente. “La propuesta de aranceles cero no sirve si no compran más energía americana. Van a tener que comprárnosla. Punto“, sentenció el mandatario. Con ello, Trump apuntó a reducir el déficit comercial estadounidense mediante la exportación forzada de gas natural y petróleo a Europa.
En contraste, el presidente estadounidense celebró que Japón haya enviado a Washington un equipo negociador de alto nivel para entablar conversaciones comerciales. “Es una gran señal. Japón entiende que el comercio justo es lo que este país necesita”, afirmó.
Las reacciones no se hicieron esperar en el Congreso. El líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, advirtió que “los aranceles de Trump están preparando el terreno para una recesión nacional”, y añadió que estos actos proteccionistas son en realidad “un impuesto masivo para los estadounidenses”.
Economistas y analistas financieros globales han expresado preocupación ante el efecto dominó que podría generar esta escalada. La bolsa de valores de Nueva York abrió el martes con pérdidas, y las proyecciones sobre crecimiento global han comenzado a ajustarse a la baja.
La tensión comercial entre las principales economías del mundo sigue aumentando, y la comunidad internacional observa con inquietud las consecuencias económicas que podrían derivarse de una confrontación arancelaria prolongada.